¿A quién no le gustan los ‘taquitos‘? El sabor de aquel platillo es tan popular que ha logrado traspasar las fronteras de México con la cocina Tex-Mex como el caso de los apodados tacos ‘gringos‘.
En principio, los tacos que se preparan en Estados Unidos tienen varias diferencias con su contraparte mexicana, ya que se realiza con una tostada en lugar de una tortilla. Su relleno tiende a ser de pollo o puerco condimentado y acompañado de lechuga.
El origen del platillo va de la mano con las primeras migraciones que existieron entre México y Estados Unidos; aunque muchas veces la comida Tex-Mex es vista con recelo y como competencia, en realidad no busca reemplazar el taco actual que se conoce en en tierras mexicanas, sino que se trata de una especialidad distinta.
Es tan popular que incluso el polémico expresidente Donald Trump en 2016 publicó una fotografía en su Twitter donde se le observa comiendo una versión estadounidense de tacos: “Feliz Cinco de Mayo. Los mejores taco bowls son hechos en Trump Tower Grill. Amo a los hispanos”, escribió.
El origen de la comida Tex-Mex
El intercambio cultural por temas migratorios fue dando forma a algunos platillos Tex-Mex, como el chili con carne y los dichosos tacos crujientes, tanto que los estadounidenses celebran una efeméride de México con tacos y guacamole: el 5 de mayo, aniversario de la batalla de Puebla.
Esta variedad de la gastronomía se distingue por ingredientes como carne de vaca, frijoles, especias y tortillas de maíz o harina fritas o al horno, varios de esos elementos son herencia del contacto entre las antiguas culturas originarias del actual territorio tejano y los colonizadores españoles.
Según Larousse Cocina, el término ‘Tex-Mex’ nació a partir del tren Texan Mexican Railway, una de las primeras rutas que llegaron a México en el siglo XIX, conectaba ambos países y fomentó la migración; sin embargo, no se refirió a la comida hasta 1963, cuando un artículo de The New York Times uso esa palabra en un contexto de gastronomía.
También se volvió una palabra famosa para los alimentos gracias a la investigadora Diana Kennedy, quien en el libro Las cocinas de México (1972) marcó la distinción entre comida mexicana en México y en Texas, ya como parte de las culturas en Estados Unidos.
De igual manera, algunos de los platillos que resaltan de este estilo son:
- Nachos, originarios de Coahuila y retomados por cercanía.
- Chimichangas, las cuales comparten con Sonora: un taco de carne con frijoles o queso, envuelto en tortilla de harina y frito en aceite.
- Chili con carne
- Fajitas
Llegan los tacos ‘gringos’
Se cuenta que hacia finales del siglo XIX un grupo de mujeres conocidas como ‘the chili queens‘ (las reinas del chili) fueron las que popularizaron estos platillos en San Antonio, Texas.
La venta de sus productos fueron una de las semillas que dieron pie a la popularidad: comercializaban esta comida callejera, fácil de llevar y barata en carritos de comida, para ese momento eran en tortilla de maíz suave.
Posteriormente, se cambiaron los ingredientes usuales por carne molida condimentada y queso cheddar, lechuga fresca y jitomate; la tortilla suave se transformó en una tostada con forma de U fue retomada por Taco Bell para hacer más rápidas sus operaciones en sus restaurantes, lo cual lo hizo masivo.
En el libro The Food Chronology, James Tragger explica que en la década de los 50 el empresario Glenn Bell, quien tenía 36 años, había iniciado con un puesto de hamburguesas y hot dogs en San Bernardino.
Al encontrarse con la inminente competencia de los hermanos McDonald, decidió buscar una forma rápida de hacer tacos y para 1956, tenía tres restaurantes llamados Taco Tía (en San Bernardino, Barstow y Red lands), una cadena que luego vendió para abrir el Taco Bell, la cual masificó los tacos ‘gringos’.
Hoy en día el taco de este estilo es un platillo bastante popular en las cadenas de comida rápida estadounidenses.