El refresco es una de las bebidas más populares en el mundo por lo que, sobre todo en verano o en épocas de calor, se antoja para la sed un vaso de refresco con hielo. Pero su sensación burbujeante no te ayudará a hidratarte y podría generar el efecto contrario.
Según Harvard T.H. Chan School of Public Health, estos líquidos azucarados están al final de la lista de los recomendados para cuidar la salud ya que sus ingredientes pueden dañar tu organismo si son consumidos en exceso.
¿Por qué tomar refresco podría deshidratarte?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública contienen un alto contenido de azúcar, por lo que afectarían los riñones. Además, contienen muchas calorías por lo que los refrescos son relacionados con enfermedades cardiacas, obesidad y diabetes.
Aunque el refresco de cola y el de naranja son los que se consideran más dañinos, ninguno genera compensación dietética, pero sí son altamente energéticos sin que aporten valores nutricionales al cuerpo.
Puede ser tentador tomarlos por su sabor, pero su ingesta podría deshidratarte y estas son las razones. Primero, su azúcar hace que el cuerpo humano utilice agua para digerirlo y transformarlo en energía, que se almacena en los músculos para posteriormente convertirse en grasa, lo cual no es saludable.
Debido a que contiene cafeína hace que se pierdan líquidos al ser ésta un diurético natural que nos ayuda a deshacernos del agua y sal por medio de la orina. Al beberlos la temperatura corporal también aumenta, por lo que más líquidos se desechan con el sudor.
Esta bebida carbonatada -no importa que sea una versión normal o light- resalta en sus presentaciones en lata o botella, pero no es lo que necesitas para mantenerte hidratado y sano, ya que para ello los especialistas recomiendan beber diariamente agua potable.