La cucharadita de aceite en ayunas no es el único uso popular de este ingrediente, las redes sociales y otros sitios del ‘Dr. Google’ están llenos de una recomendación: ingerir esa dosis antes de salir de fiesta para evitar emborracharse, ¿pero de verdad tiene algún efecto en el cuerpo?
Basta con buscar este consejo en Tik Tok para encontrar testimonios de diversas personas que afirman haber comprobado sus maravillas.
“Tomar aceite antes de irte de peda para así poder tomarte hasta el agua de los floreros”, dice el video de una joven, arreglada para irse, mientras toma su dosis aceitosa; “en conclusión: la cucharada de aceite de oliva antes de beber sí funciona. Te prendes, pero no hace show”, dice otra usuaria con clips de su noche en un antro.
“Toma 2 cucharadas de aceite de oliva 1 hora antes de beber”, se lee en diversos blogs, a veces recomiendan otros como el de aguacate.
El aceite de oliva es un ingrediente muy versátil y saludable, en especial en el contexto de una dieta equilibrada.
Esa cucharada recetada sola se relaciona con un sinfín de remedios caseros para todo mal, se toma con el estómago vacío, antes de dormir e incluso antes de salir a beber alcohol, aunque usualmente no tiene mayor efecto en el cuerpo, por ejemplo, no ayuda a bajar de peso rápido, como se suele difundir, ¿pero de verdad evita la embriaguez?
¿Qué pasa si me tomo una cucharada de aceite de oliva antes de tomar?
El objetivo, dice la creencia popular, es que el aceite va a ‘sellar’ el estómago para que el alcohol no logre hacer efecto en el cuerpo, es decir, una especie de protección que hace más lenta su absorción.
En un artículo de The Conversation, Duane Mellor, profesor de la Universidad de Coventry, menciona que la cucharada de aceite de oliva es usual en especial en los países Mediterráneo, donde hay un alto consumo del ingrediente, pero “biológicamente hablando, no existe tal cosa como ‘revestir el estómago’. Si hay algún efecto, es a través de la desaceleración del vaciado del estómago”.
En el artículo ‘Ciencia por la mañana’, publicado en la revista Science, se habla de diversas curas populares que parecen tener una justificación científica, pero carecen de apoyo riguroso y pueden ser contradictorias, este remedio es parte de las menciones.
“El aceite de oliva u otro aceite de calidad alimentaria, tomado a cucharadas poco antes de consumir alcohol, puede ayudar a ralentizar la velocidad de absorción del alcohol, dando más tiempo al organismo para adaptarse a su nueva química sanguínea. La pizza grasienta funciona igual de bien, y sabe mejor”, dice dicha publicación del autor Jim Austin.
Duane Mellor detalla que cerca del 20% del alcohol se absorbe en el estómago y lo demás en el intestino, es por ello que cualquier alimento con grasas, proteínas o cierta medida de carbohidratos va a retrasar el vaciado del estómago, “podría tener un efecto muy modesto en la ralentización de la absorción de alcohol”.
Al mezclarse esa cucharada de aceite de oliva con el alcohol se genera un efecto llamado saponificación, una reacción química entre un ácido graso y una base, algo así pasa también en la elaboración de jabones (sales de ácidos grasos y metales alcalinos).
En este modo, en teoría, las grasas del aceite disminuyen la proporción de alcohol en el sistema digestivo.
¿Qué se toma antes del alcohol para no emborracharse?
En resumen, sí puede tener un efecto moderado tomar una cucharada de aceite de oliva antes de beber alcohol, aunque otros alimentos grasos podrían tener el mismo efecto.
Sin embargo, no es un ‘remedio mágico’, pues si se mantiene un consumo prolongado, de cualquier modo la persona va a emborracharse por el exceso y habrá gastado aún más dinero.
Así, la única manera de no embriagarte es... no beber alcohol, para sorpresa de nadie.
En el artículo de Science se agrega que el azúcar puede tener el efecto contrario: aumentar la velocidad de eliminación del alcohol, no las bebidas dulces que empeoran las consecuencias, sino la fructosa, presente por ejemplo en la miel y las frutas.
“Dado que la fructosa se metaboliza rápidamente, es poco probable que tomar miel antes de empezar a beber tenga un efecto positivo. Así que empieza por zamparte un poco de aceite de oliva y, una vez que estés dentro, échate un trago de miel”, dice Jim Austin.
De acuerdo con una investigación de Daily Mail, también es importante comer proteínas (carne, pescado, huevos, lentejas), además de grasas saludables (aceite de oliva u otros aceites de semillas de buena calidad como aguacate, frutos secos y las semillas), ya que se descomponen más lentamente que los carbohidratos y las azúcares.
“También puede ser útil tomar unas cápsulas de aceite de pescado de alta calidad o de aceite omega 3 y 6 antes de beber para ayudar a recubrir el estómago y reponer los niveles de ácidos grasos que pueden agotarse más tarde por el consumo de alcohol”, agrega dicho medio.
Healthline, por ejemplo, enlista varios alimentos para comer antes de beber alcohol, ricos en proteínas, electrolitos y otros nutrientes clave que podrían tener un impacto en cómo te sentirás después:
- Huevos: altos en proteínas, ralentizan la absorción del alcohol.
- Avena: fuente de fibra y proteínas, favorece la saciedad y alivia los efectos del alcohol.
- Plátanos: alto en fibra, fácil de llevar en la bolsa, ayuda a ralentizar la absorción del alcohol en el torrente sanguíneo.
- Salmón: fuentes de ácidos grasos omega-3.
- Yogur griego sin azúcar: tiene proteínas, grasas y carbohidratos, “es uno de los mejores alimentos que puedes tomar antes de una noche de copas”.
- Chía: fuente de fibra, puede ayudar a retrasar el vaciado del estómago y ralentizar la absorción del alcohol en el torrente sanguíneo.
- Bayas (fresas, moras y arándanos), tienen fibra y ricas en agua, por lo que pueden mantenerte hidratado.
- Espárragos fritos en aceite de oliva: promueve la salud del hígado.
- Melón y sandía: frutas ricas en agua y electrolitos, ideal para la hidratación.
- Aguacate: ricos en grasas monoinsaturadas cardiosaludables, que tardan más en digerirse y ayudan a ralentizar la absorción del alcohol.
¿Cuánto es un consumo excesivo de alcohol?
El National Institute on Alcohol Abuse and Alcoholism (NIAAA) explica que el consumo excesivo de bebidas alcohólicas aumenta considerablemente la probabilidad de padecer trastornos por consumo de alcohol y otros daños relacionados con el alcohol, influyen aspectos como:
- Demasiado, demasiado rápido: cuando una mujer bebe 4 o más copas o un hombre 5 o más en solo 2 horas: eleva la concentración de alcohol en la sangre 0.08 por ciento más, aumenta el riesgo de caídas, quemaduras, accidentes de coche, desmayos de memoria, interacciones con medicamentos, agresiones, ahogamientos y muertes por sobredosis.
- Demasiado, demasiado a menudo: un consumo excesivo y frecuente incrementa el riesgo de daños agudos, como caídas e interacciones con medicamentos, como de consecuencias crónicas y aumentos dependientes de la dosis de enfermedades hepáticas, cardiopatías, y cánceres.
Considerando una bebida estándar como una cerveza de 355 mililitros con alrededor de un 5% de alcohol por volumen (alc/vol), un consumo excesivo se refiere a:
- Mujeres: 4 o más bebidas cualquier día u 8 o más a la semana.
- Hombres: 5 o más bebidas cualquier día o 15 o más a la semana.