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¿Cuál es el efecto del té de diente de león en el hígado?

El diente de león, esa planta que soplas mientras pides un deseo, es llamado ‘tónico hepático’ desde hace muchos años. Esto es lo que hace al hígado.

En las despensas alrededor del mundo hay muchas opciones para hacer infusiones, desde té verde, manzanilla, canela, cúrcuma, jengibre y uno de los que quizá no es tan conocido es el diente de león, considerado un ‘tónico hepático’ en la medicina popular.

Los tés no solo ayudan a darle un buen susto al frío, también forman parte de una interminable lista de remedios caseros para beneficiar al riñón, hígado, estómago y demás partes del cuerpo.

¿Para qué sirve la planta diente de león?

El diente de león es una planta silvestre que crece en jardines, patios y caminos, muy fácil de encontrar, la cual se caracteriza por ser de color amarillo; con el tiempo sus frutos secos forman un globito blanco que se desprende con el viento.

Su nombre científico es Taraxacum officinale, aunque popularmente la llamamos diente de león por sus pétalos puntiagudos cuando es amarilla. Esta flor tiene raíces amargas y duras, tanto esa parte como sus hojas se usan en las cocinas.

El National Institutes of Health (NIH) dice, aunque es originaria de Europa, esta planta se usa tradicionalmente en la medicina tradicional de México y otros países de Norteamérica:

“Hoy en día, el diente de león se promociona como ‘tónico’, diurético y para diversas afecciones, como infecciones y síntomas digestivos. Como alimento, el diente de león se utiliza en ensaladas, sopas, vinos e infusiones. La raíz tostada se utiliza como sustituto del café”.


¿Qué le hace el diente de león al hígado?

Según la Biblioteca Medicina Tradicional de la UNAM, desde finales del siglo XIX e inicios del siglo XX la Sociedad Farmacéutica de México describió al diente de león contra padecimientos hepáticos.

De acuerdo con Healthline, sus hojas, raíces y flores podrían tener beneficios como favorecer la salud del hígado: “se considera desde hace tiempo un ‘tónico hepático’ en la medicina popular”.

Aunque sus beneficios se han estudiado, poco se ha probado: “Sabemos muy poco sobre los efectos del diente de león en la salud. No hay pruebas científicas convincentes que respalden el uso del diente de león para ninguna afección de salud”, explica el NIH.

La revista médica Antioxidants señala que el diente de león se ha utilizado por años para prevenir o tratar diferentes enfermedades del hígado por su rica composición en fitoquímicos “con efecto demostrado contra lesiones hepáticas”.

Las investigaciones siguen en desarrollo con buenos resultados, pero falta estudiar más su efecto en humanos. En general, suelen referir a extractos o suplementos, no al té, por lo que si lo bebes como remedios es menos probable que veas efectos destacados:

  • Antioxidants (2021) destaca que su investigación en ratas encontró que el extracto de raíz tiene potencial para proteger al hígado por sus antioxidantes y puede ser preventivo para la lesión hepática.
  • Healthline agrega que investigaciones preliminares analizan si podría reducir el exceso de grasa almacenada en el hígado y proteger contra el estrés oxidativo.
  • Web MD detalla que los polisacáridos del diente de león podrían reducir la tensión del hígado y favorecen su capacidad de producir bilis, “también ayudan al hígado a filtrar las sustancias químicas potencialmente nocivas de los alimentos”.
  • Se cree su capacidad para aumentar el flujo de bilis beneficia al hígado, ya que este líquido secretado es secretado por este órgano y almacenado en la vesícula biliar.
  • Se le atribuye la capacidad de desintoxicar el hígado, aunque Mayo Clínic destaca que las dietas depurativas que prometen limpiar de toxinas son innecesarias porque el cuerpo ya lo hace solo, de hecho, es función de este órgano.

¿Cómo se prepara el té de diente de león para el hígado?

“Es común el uso de esta planta para aliviar problemas del hígado, se emplea la hoja sola en cocimiento o con flores de lechuguilla y ramas de paletaria, como agua de tiempo; o se bebe la raíz machacada, hervida y colada”, dice la Biblioteca Medicina Tradicional de la UNAM.

El diente de león requiere de ciertas precauciones antes de llegar a tu taza: debes asegurarte de que no estuvo en contacto con productos químicos como herbicidas o pesticidas, así que recogerlo del camino podría no ser la mejor idea.

¿Qué parte del diente de leon se utiliza?

Las raíces se tuestan y venden como sustituto del café; mientras que las flores y hojas se preparan como cualquier otra infusión: se lavan y añaden a agua caliente. El té se puede hacer con ambas partes.

Otra opción son los suplementos de diente de león, las cuales requieren de consulta con un especialista de salud. Healthline dice que estos se utilizan como remedio natural para controlar el azúcar en sangre y mejorar la salud de la piel, el hígado y el corazón.

¿Qué contraindicaciones tiene el diente de león?

  • National Kidney Foundation recomienda que personas con enfermedades renales limiten su ingesta por su contenido de potasio.
  • Healthline aconseja evitarlo si se están tomando diuréticos.
  • NIH dice que el diente de león en la alimentación en general seguro, pero no se sabe mucho sobre altas cantidades, durante el embarazo y la lactancia.
  • Pueden presentarse reacciones alérgicas, en especial en quienes son alérgicos a plantas como ambrosía, crisantemos, caléndulas y margaritas.

¿Qué enfermedades cura el diente de león?

El diente de león no cura ninguna enfermedad, Healthline menciona que se analiza para conocer si puede tener beneficios por sus compuestos, aunque falta mucha investigación en humanos, muchos resultados son preliminares o refieren a pruebas en animales:

  • Una rica fuente de fibra y muchas vitaminas y minerales
  • Tiene abundantes antioxidantes (betacaroteno y compuestos polifenólicos) que pueden ayudar contra el estrés oxidativo que causa enfermedades crónicas.
  • Podría tener propiedades antiinflamatorias, según estudios en animales.
  • Se analiza por sus compuestos bioactivos que podrían reducir el azúcar en sangre.
  • Estudios investigan si reduce los niveles de colesterol y triglicéridos, además de la presión.
  • Podría ayudar a perder peso.
  • Investigaciones preliminares examinan su potencial para ralentizar el crecimiento de ciertos tipos de cáncer.
  • Es rico en fibra y compuestos prebióticos que pueden favorecer la digestión.
  • Podría tener propiedades antivirales, antifúngicas y antibacterianas.
  • Es posible que tenga buenos resultados en la piel, contra el envejecimiento y el acné.

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