“¡Tírame un limoncito que tengo la boca seca, reseca, por culpa de tu amor!”: en canciones o remedios caseros, esta fruta cítrica siempre es un ingrediente, a veces en agua simple con limón, otras veces exprimida en un vaso de agua mineral.
El hábito de beber agua con gas acompañada de limón en las mañanas, al mediodía o en las comidas es usual alrededor del mundo, ¿pero sirve para algo más que refrescar?
¿Cuál es la diferencia entre agua simple y con gas?
El agua carbonatada no es más que agua simple con burbujas de dióxido de carbono, es decir, se le ha puesto gas carbónico a presión o tiene gas natural porque provienen de un manantial mineral (contienen minerales y compuestos de azufre).
“En muchos casos, el agua con gas es solo agua, que, por supuesto, es vital para la salud. Dicho esto, existen varios tipos de agua con gas y no todos son iguales”, dice Cleveland Clinic.
A algunas opciones se les añade sal y pequeñas cantidades de minerales. Quizá en el mercado encuentres variantes como agua mineral (de un manantial o pozo) y otras a la que se añaden minerales: soda (bicarbonato sódico y el sulfato potásico), agua de Seltz (algunos tipos incluyen sabores de frutas naturales y/o azúcar) y tónica (tiene quinina, azúcar o jarabe de maíz de alta fructosa).
Receta: ¿Cómo se prepara la limonada mineral?
Esta bebida también es conocida como limonada mineral y aparece con frecuencia en los menús de restaurantes, aunque en esos casos suele tener azúcares añadidos.
También se prepara como bebida cotidiana o remedio casero de forma muy simple en las cocinas: solo se agrega el jugo de un limón a un vaso de agua mineral, si se antoja puede agregarse una ramita de menta, una rodaja de limón y muchos hielos. Hay quienes le llaman ‘tehuacán preparado’ y lo sirven en un vaso escarchado de sal.
El resultado es una bebida refrescante con un toque de sabor cítrico, algunos lo retoman como remedio contra la cruda (resaca) o la gastritis, ¿pero qué tanto puedes esperar en realidad al consumirlo?
Beneficios: ¿Para qué sirve el agua mineral con limón?
Aunque no hay recomendaciones oficiales sobre los beneficios sobre esta mezcla, por separado hay ventajas sobre el agua con limón o agua mineral, ambas opciones saludables.
Es posible que veas algunos efectos positivos en sumarla a tu alimentación cotidiana. En general, es una bebida amigable con la salud de tu cuerpo y forma parte de recomendaciones para quienes buscan dejar el refresco.
Alternativa saludable a los refrescos
Según Cleveland Clinic, el agua con gas se ha convertido en una popular alternativa a los refrescos, jugos, bebidas energéticas y otras bebidas azucaradas que afectan la salud de hígado, riñones y otras partes del cuerpo, además de que en exceso se relacionan con enfermedades crónicas y aumento de peso.
El agua con gas puede mezclarse con hierbas, frutos como el pepino o el limón, “aporta un toque divertido y afrutado a tus hábitos de hidratación diarios... Siempre que beba agua con gas sin azúcares añadidos, habrá hecho una elección excelente”.
Podría ayudar a perder peso
Si sueles tomar mucho refresco y de pronto dejas de hacerlo podrías ver buenos efectos en tu cuerpo, como bajar de peso.
El agua mineral con limón puede ser un auxiliar para el control de peso, en especial si reemplazas con esta bebida a otras más calóricas.
Algunos estudios han mostrado que beber en general más agua puede ser útil para la saciedad y la dietista Lauren Sullivan destaca en Cleveland Clinic que esto aplica para la versión mineral, la cual también se cree que ayuda a mantener la comida en el estómago por más tiempo:
“Beber agua con gas puede llevar a experimentar un aumento inmediato y a corto plazo de la saciedad, o plenitud”.
Aunque la fibra pectina de los limones se ha estudiado por estimular la saciedad, la realidad es que faltan más estudios que lo prueben.
Ayuda a mantener la hidratación
Muchas personas no consumen suficientes líquidos saludables a lo largo del día, lo cual afecta al funcionamiento del cuerpo, ya que órganos como los riñones requieren de agua para mantener en marcha procesos como la eliminación y filtración de desechos del cuerpo.
“El agua con gas es tan hidratante como su homóloga sin burbujas, así que si te cuesta beber suficiente agua durante el día, no hay nada malo en cambiar un vaso o dos de agua sin gas por el agua con burbujas. Pero recuerda: ¡sin azúcares añadidos!”, dice Cleveland Clinic.
Añadir un poco de limón a tu vaso puede motivarte a beber más agua a lo largo del día.
¿Alivia la cruda?
Hay una mala noticia: no hay cura para la cruda. Sin embargo, esta bebida puede ayudar a hidratarte para aminorar un poco los malestares causados por el exceso de alcohol en tu cuerpo.
Fuente de vitamina C
El limón es una rica fuente de vitamina C, un compuesto antioxidante que ayuda a proteger al cuerpo de radicales libres que causan inflamación y enfermedades crónicas; además, refuerza el sistema inmune.
De acuerdo con Healthline, exprimir el jugo de un limón de 48 gramos en un vaso de agua aporta el 21% de valor diario de vitamina C.
Podría ayudar a la digestión
Según Healthline, el ácido cítrico del limón estimula los fluidos digestivos, por lo cual tomar un vaso de agua con este fruto antes de comer podría favorecer la digestión.
Además, el agua con gas también aparece en estudios en los que se ha visto la posibilidad de aliviar el estreñimiento y la indigestión:
“El agua carbonatada tiene beneficios para la digestión. Puede mejorar la deglución, aumentar la sensación de saciedad y reducir el estreñimiento”, destaca Healthline.
Beneficia a los riñones
El ácido cítrico de los limones se ha analizado por sus beneficios en la prevención de cálculos renales, por ello el agua simple con limón es un remedio usual contra este malestar.
No se ha analizado en específico a la versión con gas, pero el mantenerte hidratado también es un factor que previene estos padecimientos.
Contraindicaciones: Efectos secundarios del agua mineral con limón
De acuerdo con Cleveland Clinic, mientras elijas opciones sin azúcares añadidos, hay muy pocos riesgos de consumir agua mineral con limón.
De cualquier modo, hay que recordar que nada reemplaza al agua simple y es necesario no excederse con su consumo, ya que:
- El agua con gas podría causar malestar estomacal como eructos, gases, dolor de estómago y demás, ya que algunas personas no toleran bien la carbonatación; el limón es ácido y en algunas personas podría causar acidez y ardor de estómago.
- Tanto el agua carbonatada como el limón podrían afectar a los dientes: la primera tiene minerales que pueden provocar alteraciones en el esmalte dental, en especial si tienen ácido cítrico, fósforo o azúcar; en tanto, el ácido cítrico de este fruto (en altas cantidades) se analiza por la erosión al esmalte, aunque como se diluye no representa gran riesgo.