Claudia Olguín

CDMX demanda expansión urbana ordenada

El desarrollo de la Ciudad de México busca generar soluciones al déficit de vivienda y de espacios de trabajo

Nuevos modelos de vivienda y trabajo redefinen el escenario para el desarrollo inmobiliario en la Ciudad de México (CDMX).

Ante estos desafíos, los desarrolladores buscan integrar la habilitación de espacios de trabajo y alternativas que resuelvan el déficit de vivienda con un bajo impacto urbano, como unidades de menor tamaño y modelos de coliving.

“La flexibilidad y la sostenibilidad se han convertido en componentes esenciales para el éxito y la resiliencia de las ciudades, especialmente con la tendencia de expansión. Los espacios colaborativos y flexibles están emergiendo como soluciones innovadoras para enfrentar estos desafíos.”, señala Karen Scarpetta, CEO de WeWork Hispanoamérica.

Con un portafolio de 22 unidades de coworking en Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey integrados de 2016 a la fecha, la cadena de espacios colaborativos considera que el trabajo híbrido seguirá favoreciendo la flexibilidad laboral, pero también atender la movilidad de los colaboradores.

Scarpetta asegura que los usuarios independientes y los de segmentos empresariales buscan reducir las distancias, tiempos y costos en los trayectos como una tendencia de uso de espacios de trabajo donde la expansión urbana encuentre otra razón de ser.

Vivienda a la medida

Del otro lado, el mercado de vivienda enfrenta retos como el hecho de que una cuarta parte de las 12 millones de familias de Ciudad de México demanda vivienda de hasta 2 millones de pesos.

Este factor aunado al déficit de vivienda y la caída en el ritmo de edificación de nuevo producto plantean un escenario de oportunidades para un mercado en el que se realizan alrededor de 20 mil transacciones de compra-venta inmobiliaria, de acuerdo con un reporte de 4S Real Estate.

Entre 2018 y 2023, el mercado de hipotecas se contrajo 11 por ciento, donde la vivienda nueva disminuyó respecto a este indicador 21 por ciento.

Desde esta perspectiva las oportunidades para desarrolladores existen en la concentración de proyectos donde sólo 5 por ciento de la oferta se enfoca en el ticket de 2 millones de pesos, cuando se trata de un mercado de más de 10 mil unidades.

Esta dinámica ha hecho que existiera un crecimiento de 37 a 46 por ciento la participación de vivienda usada a nivel nacional, dado que justo entre el segmento medio y residencial, cuatro de cada diez ventas son usadas. Por ello, actualmente res de cada diez viviendas nuevas vendidas en México son de segmento medio con costos promedio a partir de 2.4 millones de pesos, donde además la vivienda nueva es predominante. La falta de proyectos y producto asequible para el comprador ha alejado al desarrollo del potencial donde más se requiere vivienda, que es un mercado promedio con valores de más de 1.7 millones de pesos. Analistas consideran que este contexto abre un potencial en el reciclaje de zonas, donde la participación de los desarrolladores y la gestión urbana de las autoridades permitiría detonar el desarrollo de la ciudad.

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