Hay una fábula sobre el inventor del ajedrez, se dice que cuando el juego se le presentó a un rey, este, maravillado, le ofreció al inventor cualquier recompensa como premio por la hazaña.
El inventor, pidió que un grano de arroz se le regalara en el primer cuadro de un tablero de ajedrez, dos en el segundo, cuatro en el tercero, duplicando la cantidad en cada cuadro.
El rey se burló por la poca ambición del inventor y de inmediato ordenó que se le entregara su recompensa. Después de una semana, el tesorero le informó al rey que no podía cumplir su promesa.
Al llegar a la mitad del tablero, la cantidad de granos necesarios superaba la cantidad de arroz que el reino poseía. Me gustaría contarte que este genio fue premiado por su inteligencia pero en realidad, el rey mandó matar al inventor por tratar de burlarse de él.
El inventor estaba considerando el crecimiento exponencial en su solicitud. Cuando llegas a los 64 cuadros del tablero, se necesitan 18 quintillones de granos, es decir dieciocho seguido por treinta ceros. Este es un ejemplo de crecimiento exponencial.
La ley de Moore dice que la tecnología duplica su potencia y reduce a la mitad su costo cada dos años. Gordon Moore escribió al respecto por primera vez en Electronics Magazine en 1965.
Aquí mencioné sobre la predicción del CEO de IBM en 1943, “Creo que hay un mercado global de tal vez, 5 computadoras” Su razonamiento no era incorrecto,pero era lineal, no estaba considerando el crecimiento exponencial de la tecnología y la reducción de costos.
Se predice que esta ley, en su forma literal, será obsoleta en esta década, sin embargo, con nuevas tecnologías como la computación cuántica, el costo y la potencia seguirán incrementándose. Si algo nos enseña la historia, es que apostar contra la creatividad del ser humano es mala idea.
Cuando se realiza un proyecto tecnológico, se debe considerar esta regla para proyectar la factibilidad del negocio. Amazon Web Services fué fundado con la premisa que el costo de los servicios en la nube se reduciría considerablemente y han tenido cientos de reducciones de costo desde su creación. Youtube en un dispositivo móvil era absurdo cuando lo lanzaron, pero se apostó a que tendrían liderazgo en el mercado cuando los celulares y redes móviles pudieran dar una experiencia adecuada.
La gran apuesta de realidad virtual de Meta (antes Facebook), Oculus, es un dispositivo increíble, pero es grande, pesado, incómodo, nadie puede imaginar trabajar o ver Netflix en el metaverso con ese dispositivo, ¿qué pasará cuando pese lo mismo que unos lentes de sol y la calidad del video sea superior a tu televisión?
Estás compañías apuestan al futuro, no al presente, tanto así que Facebook cambió su nombre a Meta para alinear a toda la organización al futuro. Saben lo que el metaverso puede ser en veinte años, no en dos.
Las empresas capaces de incluir en sus planes la velocidad de avances tecnológicos, son las posicionadas para ser líderes en sus industrias.
Pregunta a tu organización, ¿qué sería posible si las tecnologías necesarias para nuestro core business aumentaran 5x su potencia y redujeran su costo? Ahora, trae ese roadmap al presente.
Hasta la siguiente semana, Manuel.