Muchas ciudades de California, como San Francisco y Los Ángeles, han sufrido aumentos significativos en la delincuencia, en gran parte debido a políticas públicas incorrectas. La iniciativa de Beverly Hills, que comenzó en 2021, es un gran ejemplo de cómo el uso de tecnología puede crear una ciudad segura dentro de una urbe con altos índices de delincuencia.
Hace unos años, la policía de Los Ángeles agregó un nuevo dron llamado Hawkeye, que se une a una familia de 14 drones que patrullan la ciudad. Hawkeye le da a la policía visibilidad sobre las escenas de crimen antes de que lleguen, localiza sospechosos antes de que se logren esconder y ayuda a patrullar las calles de la zona.
El dron cuenta con cámaras de alta resolución capaces de ver una placa vehicular a casi un kilómetro de distancia. Además de esto, implementaron sistemas de reconocimiento facial y análisis de comportamiento para prevenir y responder de manera más eficiente a posibles delitos. Cuando se utiliza de manera efectiva la tecnología, la información generada por el dron puede ayudar a crear modelos predictivos y enviar vigilancia antes de que los delitos sucedan. Suena como a la película Minority Report, pero es la vida real.
Las estadísticas recientes también respaldan la efectividad de las iniciativas de Beverly Hills. Según el Jefe de Policía Mark Stainbrook, la iniciativa redujo los delitos contra la propiedad en un 34% entre junio y septiembre de 2022. Esta disminución es notable porque el crimen es más alto durante el verano; el aumento del turismo y el tráfico a menudo conducen a aumentos en los robos. Estos resultados favorables han alentado la adopción de tácticas más proactivas, como vuelos regulares de drones sobre la ciudad para buscar actividad sospechosa.
Otra iniciativa interesante es el uso e integración de la tecnología blockchain para garantizar la seguridad de documentos legales y transacciones inmobiliarias. Esto busca prevenir fraudes y asegurar la integridad de los registros, liberando tiempo y espacio a la policía y los juzgados para enfocarse en delitos graves.
A nivel global, se están implementando otras iniciativas tecnológicas para reducir el crimen. Por ejemplo, en Londres, se están utilizando sistemas de inteligencia artificial para analizar patrones delictivos y asignar recursos policiales de manera más eficiente.
En Singapur, se está probando el uso de cámaras inteligentes y sensores para detectar comportamientos sospechosos en tiempo real y responder rápidamente a posibles delitos.
Es sobresaliente que una pequeña ciudad dentro de Los Ángeles se encuentre a la vanguardia tecnológica por encima de muchos países.
Espero que los gobernantes en ciudades de México decidan tomar la seguridad como prioridad e implementar soluciones que ya han probado ser efectivas en el mundo.
No siempre se requiere aumentar la cantidad de gasto público, sino enfocarse en apalancar la tecnología para lograr impactos significativos en el bienestar de los habitantes.
¿Qué otras iniciativas te parecerían interesantes en México?
Hasta la próxima, Manuel.
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