Los mercados estadounidenses apuntan una apertura mixta sobre el cierre de la semana, cuando los inversionistas asimilan el aumento inesperado en las reclamaciones de seguro por desempleo y se preparan para otra ronda de resultado corporativos.
El Dow Jones pierde 0.16 ciento, a los 34 mil 741 puntos, mientras que el índice S&P 500 pierde 0.07 por ciento, a las 4 mil 355 unidades, y el Nasdaq avanza 0.21 por ciento, a los 14 mil 662 puntos.
En Estados Unidos, el reporte semanal de empleo mostró que las solicitudes iniciales de apoyo por desempleo aumentaron en 50 mil con respecto a la semana anterior, ubicándose en un nivel de 419 mil y por encima de las expectativas del mercado de 350 mil. Este es su mayor nivel desde el 14 de Mayo pasado.
En el frente político, el presidente Joe Biden, restó importancia a las presiones inflacionarias indicando que son de corto plazo, al derivarse de la reapertura económica.
En el frente de la política monetaria, En Europa, el Banco Central Europeo, anunció por la mañana la decisión de mantener su tasa de interés sin cambios, señalando que deberá permanecer así hasta que la inflación se estabilice en un 2 por ciento en el mediano plazo, lo que podría implicar un periodo transitorio con inflaciones por arriba de este objetivo. Asimismo, mantuvo su programa de compra de bonos, reafirmando su compromiso de comprar 1.85 mil millones de euros en bonos hasta marzo del 2022.
En el mercado de materias primas, las principales mezclas de petróleo inician la sesión con ganancias ante el optimismo en torno a su demanda, la cual sigue siendo fuerte, a pesar del brote de coronavirus. Ante esto, el WTI muestra un aumento de 0.91 por ciento a 70.94 dólares por barril.
En México, el Índice de Precios y Cotizaciones cede 0.19 por ciento a los 49 mil 938 puntos. Por otra parte, el FTSE BIVA pierde 0.29 ciento, a mil 23.24 unidades .
La inflación en el país se ubicó por encima de las expectativas del mercado, lo cual genera especulación de que el Banco de México seguirá subiendo su tasa de interés, comentó Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base.
La inflación se ubicó en una tasa anual de 5.75 por ciento y una tasa quincenal de 0.37 por ciento. siendo la mayor tasa quincenal para un periodo igual desde 2012. El 63 por ciento de la inflación quincenal estuvo explicado por el componente subyacente, que se ubicó en una tasa anual de 4.64 por ciento y una tasa quincenal de 0.31 por ciento.
De acuerdo con Siller, hacia adelante se espera que continúen las presiones inflacionarias, debido a 5 factores principales, la reactivación económica;los cuellos de botella en centros de logística; la escasez relativa de productos a nivel internacional; alza en precios de transportación marítima y alza en los precios internacionales de commodities y la nueva ola de contagios que también amenaza con crear nuevas presiones en la formación de precios a nivel global, pues algunos centros de transportación han tenido que limitar su operación ante brotes del virus.