Los principales indicadores bursátiles operaron mixtos este viernes principalmente por la creciente preocupación por los impactos económicos de la variante ómicron en el mundo, la expectativa de los primeros reportes del cuarto trimestre del 2021 y crecientes expectativas sobre una Fed menos laxa.
El Dow Jones cayó 0.56 por ciento para ubicarse en las 35 mil 911 unidades, mientras que el S&P 500 subió 0.08 por ciento, y llegar a los 4 mil 662 puntos, mientras que el Nasdaq creció 0.59 por ciento para quedar en 14 mil 893 unidades.
Al corte semanal, el Dow Jones disminuyó 0.88 por ciento y el S&P 500 bajó 0.30 por ciento, con lo que cerraron con su segunda semana con pérdidas, mientras que el Nasdaq registró un rally de tres semanas negativas, ya que cayó 0.28 por ciento.
En México, el S&P/BMV IPC perdió 0.31 por ciento al registrar un nivel de 53 mil 761 puntos, mientras que el FTSE BIVA bajó 0.33 por ciento, al cotizarse en las mil 111.02 unidades.
Sin embargo, las operaciones semanales del S&P/BMV IPC y el FTSE BIVA avanzaron 1.05 y 1.01 por ciento, respectivamente.
“Mercados se mantienen presionados en la medida que los contagios aumentan y los cuellos de botella pueden seguir generando cuellos de botella. Hacia adelante la sensibilidad en las tasas libre de riesgo puede aumentar, por lo tanto, los inversionistas mantienen prudencia”, mencionó Carlos Hernández, analista sénior de Masari.
Suben precios del petróleo
Los precios internacionales del petróleo iniciaron este viernes con ganancias por la disminución de inventarios de la AIE, sin embargo, persisten preocupaciones por una disminución en la demanda conforme avance la variante ómicron en el mundo.
El WTI subió 2.61 por ciento para tener un precio de 84.26 dólares por barril y el Brent creció 2.30 por ciento al quedar en un precio de 86.41 dólares por barril.
“Los precios del crudo extendieron las ganancias después de que los inventarios de petróleo cayeron a los niveles más bajos desde octubre de 2018. La demanda de gasolina fue más débil de lo esperado y todavía por debajo de los niveles previos a la pandemia y, si esto se convierte en una tendencia, el petróleo no podrá seguir presionando al alza”, señaló Edward Moya, analista sénior de Oanda.
La mezcla mexicana registró un precio de 76.75 dólares por barril en su operación del 13 de noviembre, lo que significó una baja de 0.29 por ciento.