Mercados

¿Es hora de volar a Europa? El euro y el dólar ahora valen lo mismo

Esta es la primera vez en la historia que el euro y el dólar tienen el mismo valor.

El euro ha caído debido a la proximidad de la guerra en Ucrania, entre otros factores. (Shutterstock)

Un euro ahora vale lo mismo que un solo dólar estadounidense por primera vez en dos décadas después de una caída histórica en la moneda común de Europa.

El euro cayó para negociarse justo por debajo de un dólar por primera vez desde 2002. Se debilitó alrededor del 12 por ciento en lo que va del año.

La caída del 12 por ciento es el resultado de múltiples presiones, desde la guerra en Ucrania hasta una crisis energética y el creciente riesgo de que Rusia corte las exportaciones de gas y empuje a la zona del euro a la recesión. En tanto, los bancos centrales se mueven a velocidades muy diferentes y un dólar en demanda, por lo que algunos analistas dicen que la paridad puede no ser el punto final, sino simplemente un trampolín hacia una mayor debilidad.

La moneda común cayó hasta 0.4 por ciento este miércoles para tocar un mínimo de 0,9998 dólares. La última etapa a la baja se produjo después de que la inflación de Estados Unidos se acelerara en junio más de lo previsto, lo que impulsó las apuestas sobre las subidas de tipos de la Reserva Federal.

La espiral descendente no ha estado acompañada por el tipo de dudas existenciales que se cernían sobre el euro cuando se desplomó durante sus primeros años a principios de este siglo, o cuando se desató la crisis de la deuda soberana hace una década. Sin embargo, sigue siendo un problema para el Banco Central Europeo.

También es un problema para los consumidores en la economía de 12 billones de euros, alimentando un pico de inflación que ya está fuera de control, con precios que suben a un ritmo récord cercano al 9 por ciento.

El descenso del euro este año es solo una parte de una historia global de dominio del dólar. El dólar ha estado a favor este año como una inversión de refugio, ayudado por las tasas de interés más altas de Estados Unidos y ha habido especulaciones de que el repunte podría incitar a las autoridades mundiales a intervenir para debilitarlo en algún momento.

En una reunión en Tokio el martes, la secretaria del Tesoro de EU, Janet Yellen, y el ministro de Finanzas de Japón, Shunichi Suzuki, dijeron que los tipos de cambio volátiles representan un riesgo y se comprometieron a consultar y “cooperar según corresponda en cuestiones monetarias”. El yen ha caído a su punto más débil frente al dólar desde 1998.

Mientras tanto, la moneda única ha sufrido particularmente debido a la proximidad de Europa a la guerra de Ucrania y su dependencia de las importaciones de energía de Rusia.

El euro, ahora la moneda de 19 países y alrededor de 340 millones de personas, ha tenido muchos altibajos desde que comenzó a operar en 1999. Un episodio de debilidad en sus primeros días empujó a la moneda por debajo de los 85 centavos frente al dólar y generó preguntas sobre su viabilidad e incluso terribles predicciones de su desaparición.

El ‘tropezón’ del euro

La caída inicial del euro dio paso a un período de apreciación, con la moneda llegando a 1.60 dólares en 2008. Esa fortaleza fue vista como perjudicial para la economía, y los políticos de la zona del euro la culparon de perjudicar a las empresas. Entre esas voces estaba la entonces ministra de finanzas de Francia, Christine Lagarde.

El euro se debilitó nuevamente cuando la crisis financiera mundial se afianzó en 2008 y luego entró en un período de volatilidad cuando la crisis de la deuda soberana de Europa causó estragos. Una vez más, el futuro del euro estaba en duda en medio de costos de endeudamiento altísimos, rescates para naciones endeudadas, una recesión y desempleo récord. Fue en ese momento que el entonces presidente del BCE, Mario Draghi, comparó el euro con un abejorro, un “misterio de la naturaleza” que no debería poder volar, pero puede.

Una vez pasado lo peor de ese episodio, el BCE continuó con los estímulos, limitando el alza de la divisa. Luego, a partir de mediados de 2021, el euro comenzó a deslizarse hacia la paridad.

Si bien el BCE podría subir más agresivamente para impulsar el euro ahora, una razón que el miembro del Consejo de Gobierno Robert Holzmann ha utilizado para justificar un aumento de medio punto, su agencia puede verse limitada por las perspectivas económicas más sombrías. En una encuesta de Bloomberg de este mes, los economistas estimaron el riesgo de una recesión en la zona del euro en un 45 por ciento, frente al 30 por ciento de junio.

“Sin duda, el BCE estará bastante preocupado por la medida, especialmente si se desarrolla en una mentalidad de ‘vender la eurozona’”, comentaron los estrategas de ING Groep NV dirigidos por Chris Turner. “Sin embargo, ante el riesgo inminente de recesión, y el euro como moneda procíclica, las manos del BCE pueden estar atadas en su capacidad para amenazar con aumentos de tasas más agresivos en defensa del euro”.

También lee: