Las acciones tecnológicas chinas parecen dispuestas a subir el miércoles, ya que la reorganización de Alibaba proporciona un punto brillante en las acciones asiáticas tras la caída de las acciones estadounidenses.
Los futuros del índice Hang Seng subieron un 1.8 por ciento, mientras que las acciones australianas fluctuaron y las japonesas subieron. Los contratos estadounidenses registraron pequeñas ganancias tras la sesión bajista del martes para el S&P 500 y el Nasdaq 100, de fuerte componente tecnológico.
- Los futuros del Hang Seng subieron un 1.8 por ciento.
- El Topix japonés subió un 0.3 por ciento.
- En Australia, el S&P/ASX 200 registró pocos cambios.
Las acciones de Alibaba Group Holding Ltd., que cotizan en EU, subieron un 14 por ciento tras conocerse la noticia de que el líder chino del comercio en línea se dividirá en seis unidades de negocio, una importante reestructuración que promete dar lugar a varias ofertas públicas iniciales. Las acciones de Softbank Group Corp., que cotiza en bolsa y posee una importante participación en Alibaba, subieron hasta un 5.9 por ciento el miércoles.
El índice Golden Dragon de empresas chinas que cotizan en EU subió un 3.5 por ciento el martes, su mejor día en casi dos meses. El avance reflejó un nuevo cambio en la actitud de los inversores hacia las empresas tecnológicas chinas tras las medidas enérgicas adoptadas por Pekín contra grandes empresas como Tencent Holdings Ltd. y Baidu Inc. que también subieron en EU.
El dólar australiano cayó y las acciones recuperaron terreno tras unos datos de inflación inferiores a lo esperado. Los rendimientos de los bonos australianos recortaron una subida matutina después de que la venta de bonos del Tesoro impulsara el martes los rendimientos al alza en toda la curva. Los bonos del Tesoro apenas variaban al inicio de las operaciones asiáticas, después de que elrendimiento a dos años subiera ocho puntos básicos y el equivalente a 10 años subiera cuatro puntos básicos el martes.
Por su parte, el índice del dólar se mantuvo prácticamente estable, tras cerrar el martes en su nivel más bajo en ocho semanas.
Los movimientos se producen mientras los inversores se preparan para una serie de datos sobre la economía estadounidense esta semana, incluyendo la medida preferida del banco central de la inflación - el llamado deflactor PCE básico - que es probable que factor en la próxima decisión de la Reserva Federal de tasas.
El presidente de la Fed de San Luis, James Bullard, afirmó que “una política monetaria adecuada puede seguir presionando a la baja sobre la inflación” a pesar de las turbulencias bancarias. Mientras tanto, los consumidores estadounidenses parecen haber superado las quiebras bancarias, con las últimas cifras de confianza del consumidor inesperadamente al alza en marzo.
Los operadores de swaps han valorado en más de un 50 por ciento la probabilidad de que la Reserva Federal suba los tipos un cuarto de punto en su próxima reunión, con planes para relajarlos bruscamente a continuación. Sin embargo, varios estrategas se han unido al Black Rock Investment Institute al afirmar que los mercados se equivocan al esperarrecortes inminentes de los tipos.
“La crisis bancaria y las nuevas normas más estrictas para los bancos equivalen a una o dos subidas de tipos”, dijo Eva Ados, estratega jefe de inversiones de ERShares, en una entrevista con Bloomberg Television. “Existe una gran posibilidad de que se produzca un error de valoración. Estamos poniendo en precio la bajada de tipos en lugar de la razón por la que están bajando, que es la crisis bancaria.”
Los inversores también se centraron en los bancos europeos después de que los fiscales franceses dijeran que prestamistas como Societe Generale SA y BNP Paribas SA se enfrentan a multas colectivas de más de mil millones de euros (mil 100 millones de dólares) como parte de una investigación sobre fraude fiscal y blanqueo de dinero. Un índice de bancos europeos subió el martes a pesar de las noticias.
Por otra parte, el petróleo subió después de que un enfrentamiento entre Irak y su región kurda redujera las exportaciones. El oro apenas varió y el Bitcoin cotizó en torno a los 27 mil 300 dólares.