Si bien el aumento en la deuda corporativa de las economías de mercados emergentes ha sido el foco de atención, la deuda pública de esos países comienza a cobrar relevancia en el plano internacional, pues alcanzó un récord de 14 billones de dólares en 2017, de acuerdo con el Instituto de Finanzas Internacionales.
Dicha deuda aumentó en alrededor de seis billones de dólares desde 2010, para totalizar un monto equivalente a 48 por ciento del PIB de esas economías, menos que en los mercados desarrollados, que es casi 110 por ciento del PIB.
Sin embargo, el Instituto advierte que la deuda de estos países está aumentando rápidamente con relación al tamaño de sus economías. En los últimos años, el incremento ha sido más notable en Ucrania, Egipto, Brasil, Sudáfrica y Colombia.
Por otra parte, señaló que existe el riesgo de refinanciamiento, ya que en 2019 vencerá un monto récord de más de 365 mil millones de dólares en bonos del gobierno y préstamos sindicados, frente a los 185 mil millones de dólares en 2018 y 160 mil millones en 2017.
Además, se espera que las necesidades de financiamiento de los gobiernos en 2018 sean muy altas, con más del 15 por ciento del PIB en Egipto, Pakistán, Sri Lanka, Hungría y Ecuador. Por el contrario, Rusia, Chile, Indonesia, Filipinas y Colombia tendrán necesidades de financiamiento gubernamental relativamente bajas.
"El aumento de las tasas de interés en Estados Unidos dificultará que muchos economías emergentes cumplan con las necesidades de financiamiento del gobierno", señalaron los economistas del Instituto.