Los mercados accionarios en Wall Street y México cerraron las operaciones del 'Lunes Negro' impactados por la turbulencia de ventas provenientes desde Europa y Asia, luego de que la caída de los precios del petróleo en poco más del 20 por ciento sacudiera a los inversionistas desde las primeras operaciones del domingo del otro lado del Atlántico y con las alertas de una pandemia 'muy real' causando mayores estragos.
Las acciones estadounidenses cayeron más del 7.5 por ciento en el peor día en Wall Street desde la crisis financiera.
El Dow Jones perdió más de 2 mil puntos, la mayor cifra de la historia. Y el S&P 500 tuvo su peor caída desde diciembre de 2008 y ahora está en un mínimo de nueve meses.
La sacudida comenzó desde la apertura, con pérdidas que alcanzaron el 7 por ciento en cuatro minutos, lo que provocó un paro de emergencia del NYSE que detuvo el comercio durante 15 minutos.
El Dow Jones cerró con un desplome 7.79 por ciento, o 2 mil 13 puntos, a 23 mil 851 unidades. El promedio el S&P 500 cayó 7.64 por ciento, a las 2 mil 754 unidades y el tecnológico Nasdaq perdió 7.29 por ciento, a los 7 mil 951 puntos.
La Bolsa Mexicana de Valores se contagió de la turbulencia a nivel global y borró más de 2 mil 500 puntos, que la llevaron a registrar su mayor caída desde el 22 de octubre de 2008. El Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), cayó 6.42 por ciento, mientras que el FTSE BIVA perdió 6.49 por ciento.
"Cuando hay pánico, tiende a no haber una fijación de precios precisa de los activos", dijo Kristina Hooper, estratega jefe de mercado global de Invesco, en una entrevista en la sede de Bloomberg en Nueva York. "La venta hoy para mí es emblemática de eso. Realmente es una reacción instintiva a lo que sucedió durante el fin de semana".
La tensa situación provocada en los mercados por el coronavirus se acentuó luego de que Arabia Saudita señaló el fin de semana que planea empezar a producir más de 10 millones de barriles de petróleo por día a partir de abril después de que su alianza con Rusia dentro de la OPEP+ se viniera abajo en la última reunión del grupo, el viernes pasado y tras una semana de pláticas en Austria.
El mayor exportador de petróleo del mundo comenzó una 'guerra' de precios al aplicar el mayor recorte a los precios en los cuales vende crudo al extranjero en los últimos 20 años, ofreciendo descuentos sin precedentes en Europa, Medio Oriente y Estados Unidos para que las refinerías compren el producto a los saudíes a expensas de otros proveedores.
Las diferencias entre la OPEP y Rusia, ha llevando a una reducción de casi del 30 por ciento en los precio del petróleo.
En este contexto, los precios internacionales del petróleo reportaron sus mayores caídas desde 1991.
El WTI perdió 24.1 por ciento a los 31.13 dólares por barril; el Brent borró 24.4 por ciento para ubicarse en los 34.36 dólares por barril y la mezcla mexicana de petróleo llegó a los 24.43 dólares, su menor nivel desde el 24 de febrero del 2016, y registró una pérdida de 31.7 por ciento.
"A no ser que haya un acuerdo entre los saudís, que pueden mantener el precio a este nivel, y Rusia, que no puede, podemos esperar que el precio del petróleo siga bajo presión. El efecto ha sido brutal en los mercados y con los inversionistas en modo pánico, es difícil ver un cambio de sentimiento en el corto plazo", comentó Adam Vettese, analistas de eToro.
Desde hace poco más de un mes, la aparición del coronavirus y ahora este nuevo riesgo, que amenaza con inundar un mercado ya saturado, ha provocado un aumento en la percepción del riesgo a nivel global que ha llevado la tasa de los bonos del Tesoro a un mínimo histórico de 0.4964 por ciento y al oro a los mil 700.14 dólares la onza, nivel no visto desde el 18 de diciembre de 2012.
"Los movimientos de los mercados han sido un recuerdo de la crisis financiera. No creemos que suceda como en 2008, ya que la economía y el sistema financiero están en una posición mucho más fuerte", explicó el BlackRock Institute.
El equipo de análisis de la institución señaló que sigue viendo una expansión, pero esto requiere que los responsables de la formulación de políticas actúen con decisión para evitar que el coronavirus termine el ciclo actual de manera prematura.
En datos económicos, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicó la inflación se ubicó en 3.70 por ciento anual durante febrero de 2020, su mayor dato desde julio de 2019.
"Con la subida en el tipo de cambio y de los mercados de materias primas es de esperarse que suban los precios de las importaciones y que se presione la inflación, aunque no de manera inmediata, dificultando al Banco de México el recortar la tasa de interés si no se llevan a cabo medidas para suavizar las decisiones del mercado", comentó, Gabriela Siller, directora de análisis bursátil y financiero de Banco Base.
Con información de Rubén Rivera.