Al cierre de la semana la revancha favoreció al peso, que se recuperó de las pérdidas del jueves, a medida que el billete verde se debilitó y los inversionistas en los mercados de capitales apuntaron ganancias titubeantes.
Con este desempeño, la moneda mexicana se apuntó su tercera semana consecutiva de avances frente a la divisa norteamericana.
De acuerdo con datos de Banco de México, la moneda mexicana se apreció en los cinco días 0.819 por ciento, para ubicarse en 21.806 unidades, esto en el ámbito interbancario.
En la sesión de hoy el avance fue de 1.3571 por ciento.
En ventanilla bancaria, el dólar se vende en 22.30 pesos, según Citibanamex.
La paridad dólar-peso tocó un mínimo de 21.8307 unidades a las 12:36 horas, mientras que el máximo se ubica en 22.1595 unidades visto a las 17:05 horas del jueves.
El jueves, y tras el inicio del simposio de banqueros centrales de Jackson Hole, la divisa mexicana así como la volatilidad en el mercado registró un fuerte salto durante la comparecencia de Jerome Powell, líder de la Reserva Federal.
El índice Bloomberg, que mide la fortaleza del dólar frente a una canasta de diez divisa bajó en la semana 0.77 por ciento, a los mil 162 puntos. Su nivel más bajo desde finales de 2017.
Los mercados accionarios a nivel global presentaron movimientos con un sesgo ligeramente negativo aunque no con ajustes considerables, después de validar algunos datos económicos en Asia y Europa. En contraste, Wall Street siguió con su paso positivo aunque con menor fuerza.
La descripción del presidente de la Reserva Federal, del nuevo enfoque del Banco Central para establecer la política monetaria ha sido recibida con cierto escepticismo por parte de los inversionistas.
Con la inflación permaneciendo obstinadamente baja, pocos parecen creer que la Fed pueda rebasar su objetivo del 2 por ciento en el corto plazo.
Un lugar donde el movimiento se hará sentir en un plazo más inmediato es al otro lado del Atlántico en el Banco Central Europeo, donde también se está llevando a cabo una revisión de políticas. La medida de la Fed podría ayudar a la presidenta Christine Lagarde a impulsar una política similar para la zona euro, lo que permitiría al Banco Central Europeo (BCE) permanecer más acomodaticio durante más tiempo.
En cuanto a indicadores económicos, durante julio los ingresos personales en EU aumentaron a una tasa mensual de 0.4 por ciento y una tasa anual de 8.2 por ciento, principalmente por los estímulos fiscales aplicados.
La tasa de ahorro, que se ubicó en 17.8 por ciento, continúa muy por encima del promedio de 7.94 por ciento observado durante 2019, indicando cautela por parte de los consumidores.
Por otra parte, el consumo aumentó a una tasa mensual de 1.9 por ciento, mientras que en su variación anual, el consumo personal disminuyó 2.8 por ciento
Además la atención se mantuvo en una segunda ola de contagios de COVID-19 en Europa, a las posibles afectaciones del huracán 'Laura' así como a la tensión entre EU y China, resultados de las posibles restricciones a aplicaciones tecnológicas.
En el frente político, Donald Trump aceptó el jueves la nominación presidencial del partido republicano. En su discurso, el presidente prometió usar su segundo mandato para arreglar las dificultades causadas por el virus, incluyendo la salud pública y la recuperación económica.
Además, advirtió que su oponente Joe Biden, podría deshacer sus políticas comerciales y servir como un "caballo de Troya para el socialismo". Como se ha mencionado anteriormente, las próximas semanas los mercados financieros pondrán más atención al proceso electoral de Estados Unidos, lo que podría ocasionar episodios de volatilidad.
Del otro lado del mundo, el yen japonés avanzó a pesar de que el primer ministro japonés, Shinzo Abe, anunció su renuncia debido al deterioro en su salud. Indicó que se quedará en el puesto hasta que el Partido Liberal Democrático elija un sucesor.
"Cabe señalar que la reacción del mercado cambiario a la renuncia de Abe ha sido moderada, pues existe confianza en que probablemente habrá continuidad de las políticas, sobre todo porque las posturas altamente flexibles en lo monetario y fiscal, se mantendrán los próximos meses como consecuencia de la crisis del coronavirus.
"No obstante, el mercado de capitales reaccionó de manera negativa en Japón, en donde el índice Nikkei perdió 1.41 por ciento en la sesión del viernes, cerrando la semana con un retroceso moderado de 0.16 por ciento", comentó Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de Banco Base.
Con información de Bloomberg*