Los contratos del crudo WTI se recuperaron este miércoles desde su cierre más bajo en seis años registrado en la sesión previa, después que un informe del gobierno reportara una caída semanal en los suministros de crudo en Estados Unidos.
En tanto la caída del dólar a su nivel más bajo en un mes frente al euro, reforzó el atractivo de las materias primas denominadas en la moneda estadounidense como una inversión.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), el WTI subió 0.5 por ciento para terminar en 43.30 dólares en revirtiendo su menor nivel de cierre de seis años registrado el martes de 43.08 dólares.
El Brent, en tanto, cerró en 49.66 dólares por barril, 1.05 por ciento más que al cierre de la sesión anterior en el Intercontinental Exchange de Futuros de Londres. El martes, el contrato perdió 1.23 dólares para cerrar en 49.18 dólares.
Los precios del crudo ganaron terreno luego que el Departamento de Energía publicara que las reservas bajaron la semana pasada a 453.6 millones de barriles, aunque siguen en su nivel más alto en ocho décadas.
El total de existencias de crudo y productos refinados, incluida la Reserva Estratégica, alcanzó la pasada semana los 1.974,6 millones de barriles, levemente por encima de los 1.969 millones de barriles de la semana previa.
El dato contrarrestó la nueva devaluación del yuan que anunció hoy China, un movimiento que castiga a las empresas exportadoras con intereses en el país asiático y que ayer ya empujó a la baja un 2.43 por ciento el crudo de referencia en Europa.
El yuan tocó mínimos de cuatro años el miércoles luego de que China permitió que la moneda se debilitara aún más tras realizar el martes una mini devaluación para apuntalar su desacelerada economía, donde la producción industrial se expandió menos de lo esperado en julio.
El dólar caía más de un 1 por ciento frente a una canasta de monedas, presionado por las dudas sobre si la Reserva Federal de Estados Unidos elevará las tasas de interés dada la devaluación de la moneda china.
China es el mayor consumidor mundial de petróleo después de Estados Unidos y un yuan débil afecta el poder de compra del país asiático de las importaciones en dólares como el petróleo, afectando potencialmente la demanda de combustible.