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Los inversores extranjeros atraparon la deuda del Gobierno mexicano al ritmo más rápido en más de tres años en diciembre del año pasado, según datos rastreados por Intercam Casa de Bolsa.
Las entradas alcanzaron 109 mil millones de pesos (5 mil 800 millones de dólares), luego de seis meses consecutivos de salidas, dijeron en una nota los estrategas de Intercam Alejandra Marcos y Santiago Fernández.
La mayor parte del dinero se destinó a Cetes a corto plazo, aunque los bonos en pesos a largo plazo también se beneficiaron.
Los inversores redoblaron en deuda mexicana al final del año, a medida que la moneda se fortaleció y el Banco de México (Banxico) mantuvo una de las tasas de interés real más alta en los mercados emergentes.
El compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador con la prudencia fiscal y las tasas de interés relativamente altas ha aumentado el atractivo del carry trade en México.
El apetito de extranjeros por estos activos es una señal de que existe confianza en que se mantendrá el equilibrio macroeconómico, además de que refleja el atractivo relativo de las tasas mexicanas, especialmente en instrumentos de corto plazo", escribieron Marcos y Fernández.