México tiene un gobierno que piensa totalmente diferente a todo el mundo en cuanto a la respuesta a la actual crisis ocasionada por la pandemia de COVID-19, ya que no está dispuesto a endeudarse y eso va a dificultar la recuperación económica del país, señaló Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México.
"El presidente de México simplemente dice que no vamos a recurrir a una deuda, porque después tendremos problemas mayores; recuerden lo que pasó en la década de los 80's, precisamente esa crisis de deuda llevó a que el país no pudiera crecer en toda una década", indicó.
El subgobernador del banco central consideró que esta no es una solución de fondo, sino que implica cambiar de problema.
En entrevista a través de un podcast, con Gabriel Casillas y Alejandro Padilla, especialistas del área de análisis de Banorte, Heath añadió que "lo que está haciendo el presidente es cambiando el problema, en vez de tener una recesión corta y después tener un dolor de cabeza grandísimo, con una deuda casi impagable, él está apostando quizás a tener una recesión un poco más profunda y complicada, pero cuando salgamos no vamos a tener ese dolor de cabeza que seguramente van a tener todos los demás países".
Duración de crisis
El funcionario consideró que la duración de la crisis en México dependerá de varios factores, entre ellos la reapertura de la actividad productiva y si esta se hace en sincronía con la economía de Estados Unidos, además de que se debe checar si no hay una segunda etapa de afectación de la pandemia.
Heath considera que el repunte de la inflación a nivel global será una incógnita, pues en la mayoría de las naciones la política monetaria viene acompañada de medidas fiscales sin precedentes.
"Si no pasó en la última década, no necesariamente debería de pasar adelante, es una gran incógnita, se supone que la cantidad de dinero está ligada directamente al proceso inflacionario; nunca habíamos visto un incremento en la cantidad de dinero como lo hemos visto en esta última década", señaló.
En cuanto a México, subrayó que "la base monetaria se está expandiendo a niveles de 14 a 15 por ciento a tasa anual, directamente como una respuesta a una mayor demanda de dinero por la cuestión de la pandemia" por lo que considera que la gente va a los cajeros a sacar cantidades más grandes de dinero por cuestiones de precaución.
En su opinión, en donde se observan presiones inflacionarias es en el rubro de alimentos, lo que resulta preocupante.
"Prácticamente todos los demás rubros están por debajo del objetivo de Banxico, salvo el de las mercancías alimenticias, realmente preocupa mucho y es un fenómeno que existía desde antes de la pandemia", enfatizó, y dijo que esto es preocupante debido a que este rubro es el que más afecta a las familias de menores ingresos y en donde el desempleo es característico en estos meses.
México seguirá recortando tasa de referencia
En cuanto a la política monetaria, el subgobernador del Banxico dijo que México observará nuevas reducciones en su tasa de interés de referencia.
"En mi opinión personal, sí creo que vamos a ver todavía bajas en la tasa de política monetaria. Creo que todavía no hemos llegado al punto terminal de este ciclo de relajamiento", dijo en el podcast organizado por Grupo Financiero Banorte.
Expresó que en el seno de la Junta de Gobierno del instituto central actualmente hay consenso de que la tasa de interés de referencia debe seguir bajando.
Aunque el tema de qué tan rápido van a seguir hacia adelante y hasta dónde van a llegar, es algo que ni ellos mismos, que toman la decisión, conocen porque va a depender de la evolución de los datos.
"La parte principal del debate o de la discusión que tenemos internamente es precisamente este asunto (la velocidad de la baja de tasa), creo que todos estamos de acuerdo en la dirección y las decisiones últimas han sido unánimes, y donde hay mucha discusión es más bien yo creo que en el ritmo".
Es decir "si debemos de ir de 50 en 50 (puntos base) o de 75 o de 25, que si debemos de hacer una baja cada mes o simplemente quedarnos dentro de la estructura de las 8 juntas o decisiones que tenemos programadas, etcétera, etcétera", comentó.
Todo eso está abierto y las decisiones se van a ir tomando paso a paso, añadió el subgobernador del Banxico.
Señaló que aún intenta adivinar y discutir cómo votarán los otros cuatro miembros, y que los políticos tampoco saben en qué nivel concluirá el ciclo de flexibilización.
"Estamos examinando todo, desde el impacto mismo sobre la actividad económica, sobre el empleo, la solidez del sistema financiero, estamos monitoreando los indicadores de estrés, el índice de condiciones financieras, y la operación diaria del mercado de dinero", informó.
Por lo pronto, México continúa manteniendo una de las tasas reales más altas del mundo para proteger al peso mexicano y limitar la inflación.
Respecto a Estados Unidos, Heath señaló que la Reserva Federal (Fed) no se movería hacia tasas de interés negativas, pues considera que ellos "simplemente inyectarán más (estímulos) a la economía, que a final de cuentas es más directo y más efectivo".
Heath, quien aclaró que estaba hablando a título personal, es uno de los cinco miembros que votan sobre la tasa de interés de referencia en Banxico, como se conoce al Banco Central mexicano.
Los comentarios de Heath se producen menos de una semana después de que el Banxico redujera la tasa de interés interbancaria en medio punto a 5.50 por ciento, la más baja desde fines de 2016.
México enfrenta su peor contracción económica en casi un siglo, lo que ha llevado a Banxico -que tradicionalmente es uno de los bancos centrales más cautelosos del mundo- a reducir los costos de endeudamiento en medio punto en reuniones no programadas en marzo y abril.