El peso siguió el desempeño del billete verde en los mercados internacionales y se depreció durante las operaciones de este viernes, en una sesión que primero se vio influenciada por las tensiones en Medio Oriente y que después reaccionó a los datos negativos de la actividad manufacturera en Estados Unidos.
La presión sobre el tipo de cambio encontró una válvula de escape tras la presentación de los datos manufactureros estadounidenses; sin embargo, esta no fue suficiente para poner la balanza a favor del peso.
De acuerdo con datos del Banco de México, la moneda mexicana perdió 0.36 por ciento, que ubican la paridad en 18.925 unidades.
El índice Bloomberg, que mide la fortaleza del billete verde frente a una canasta de diez divisas, se apreció 0.89 por ciento, a los mil 188.55 puntos, después de tocar un máximo de mil 191 unidades a las 5:49 horas.
En ventanillas de Citibanamex, el dólar se vende en 19.18 pesos, cifra igual al cierre reportado el jueves.
Desde la apertura de las operaciones del otro lado del Atlántico y en las primeras de este lado del mundo, el billete verde mostró fortaleza en los mercados internacionales derivado de las tensiones geopolíticas en Medio Oriente por la muerte de Qassem Soleimani, jefe de la Fuerza Quds de élite de Irán, en un ataque aéreo estadounidense en las inmediaciones del aeropuerto internacional de Bagdad.
El Pentágono confirmó la noche del jueves que el Ejército de Estados Unidos mató a Qassem Soleimani, por orden del presidente Donald Trump.
En el ataque también pereció Abu Mahdi al Muhandis, subcomandante de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), un grupo paramilitar apoyado por Irán, según las fuentes.
Esto intensificó las tensiones geopolíticas en Medio Oriente, impactando el apetito por activos de riesgo en los mercados globales y los precios del petróleo.
Cuando parecía que estas noticias dominarían la sesión, los datos del ISM Manufacturero estadounidense mostraron una contracción de la actividad durante diciembre a los 47.2 puntos, su nivel más bajo desde junio de 2009 y su quinto mes consecutivo de contracciones.
Miembros de la Reserva Federal se pronunciaron ante ambos hechos. Thomas Barkin, presidente del Fed de Richmond dijo que una posible escalada de las tensiones entre Estados Unidos e Irán es uno de los choques que podrían amenazar la expansión económica norteamericana, que por ahora parece "bastante saludable".
Charles Evans, presidente del Fed de Chicago coincidió que la economía está en buen estado y es robusta, pero estos hechos son un signo de interrogación; sobre los datos del ISM el funcionario señaló que sorprenden de manera negativa las cifras pero la confianza es inquebrantable.
Por último, las minutas de la Reserva Federal presionaron un poco más los negativos luego de que los funcionarios de la Fed temen que la inflación se mantenga demasiado baja a la luz de una débil economía global y no dejarán entrever tan claramente movimientos futuros de política monetaria. Los operadores mantienen sus apuestas de un recorte de 25 puntos base para finales del año.
En el mercado energético, los precios del petróleo reaccionaron tal como lo anticiparon los contratos de futuros y apuntaron una sesión de alzas, a niveles de finales de abril del año pasado. El WTI en Nueva York subió 2.47 por ciento a los 62.69 dólares por barril. Mientras que, el Brent en Londres avanzó 2.97 por ciento a los 68.23 dólares por barril.