Las tensiones comerciales, bajas tasas de interés de los bancos centrales y la desaceleración global serán factores que impulsarán los precios del oro en el corto plazo, ya que los inversionistas seguirán buscando activos de refugio seguro, de acuerdo con especialistas.
La semana pasada el precio del oro en el mercado spot llegó a mil 535 dólares la onza, niveles no vistos desde 2013, sin embargo, algunos analistas esperan que el metal llegue a niveles más altos debido a la incertidumbre global.
El banco de inversiones Goldman Sachs elevó su pronóstico del precio del oro para los próximos tres y seis meses, a mil 575 y mil 600 dólares la onza respectivamente, a la luz de las crecientes tensiones de la guerra comercial.
La aversión global al riesgo provocó que el oro cerrara por tercera semana consecutiva con ganancias, apoyado por una mayor demanda de los inversionistas en los fondos de inversión o ETFs respaldados por el metal.
Alistair Hewitt, jefe de inteligencia de mercado en el Consejo Mundial del Oro, destacó que a medida que avanza la segunda mitad del año, continuarán los factores que sustentan las entradas de ETFs y las compras de los bancos centrales, incluida una política monetaria más flexible y la incertidumbre geopolítica.