Los inventarios de crudo de Estados Unidos sorprendieron a los mercados al registrar una caída en la semana pasada debido a que las refinerías elevaron su producción tras las detenciones por el huracán Harvey, mientras que las existencias de gasolina subieron.
De acuerdo con el reporte de la gubernamental Administración de Información de Energía (EIA), los inventarios de crudo bajaron en 1.8 millones de barriles en la semana terminada el 22 de septiembre, comparado con las expectativas de analistas de un alza de 3.4 millones de barriles.
Por el contrario, las existencias de crudo en el punto de entrega de Cushing, en Oklahoma, subieron en 1.2 millones de barriles, dijo EIA.
La tasa de utilización de las referías subió en 5.4 puntos porcentuales.
Los inventarios de gasolina crecieron en 1.1 millones de barriles, comparado con una previsión de analistas consultados por Reuters de una baja de 921 mil barriles.
Las existencia de destilados, que incluyen el diesel y el combustible para calefacción, bajaron en 814 mil barriles, frente a la expectativa de una baja de 2.2 millones de barriles.
Las importaciones de crudo de Estados Unidos disminuyeron la semana pasada en 504 mil barriles por día.
La tendencia en los precios del petróleo se mantiene mixta tras conocerse las cifras. El barril del Brent de Londres cae 0.64 por ciento a 57.55 dólares, mientras que el WTI de Estados Unidos avanza 0.40 por ciento, a 52.09 dólares.
Con información de Bloomberg y Reuters
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