Si últimamente tienes altibajos en tu trayectoria laboral y no tienes un empleo estable, seguramente te preguntas qué pasa con tu Afore cuando dejas de cotizar.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), si dejas de trabajar, el dinero aportado a tu Afore seguirá intacto en manos de las administradoras.
Además, tu dinero seguirá generando rendimientos para el retiro, pero en una cantidad menor porque no está recibiendo ingresos de tu trabajo. Tienes la opción de hacer aportaciones voluntarias para que tus recursos monetarios sigan creciendo y tener el retiro que deseas.
La Consar también informa que la cuenta del trabajador ‘inactivo’ tiene los mismos beneficios que las cuentas de los empleados ‘activos’. Por ejemplo, altos rendimientos, derechos de traspaso, acceso a estados de cuenta y servicios personalizados.
Si dejas de trabajar por un largo periodo de tiempo, cuando quieras hacer retiros parciales tendrás que comprobar tu aportación de los últimos 12 bimestres. Un escenario negativo podría traer como consecuencia que al solicitar tu pensión, no cumplas con las semanas de cotización.