Monterrey

Thomas Michael Hogg: La importancia del emprendimiento

Los emprendedores motivados y sus nuevas empresas son un componente fundamental para el crecimiento y desarrollo económico de cualquier país.

Emprendedores son buenos por naturaleza para detectar oportunidades y, a su vez, resistentes para superar retos. Los emprendedores motivados y sus nuevas empresas son un componente fundamental para el crecimiento y desarrollo económico de cualquier país. Sin emprendedores/as, habría menos innovación, menos oportunidades laborales y menos productividad. Debido a la pandemia, la mayoría de las economías experimentaron una disminución de la TEA (por sus siglas en inglés Total early-stage Entrepreneurial Activity). Para ser más precisos, en 2019 y 2020 la actividad empresarial en etapa inicial se redujo en una cuarta parte en cuatro economías importantes de Europa y América del Norte. Aun así hay países como Colombia que pudieron mejorar su tasa de actividad emprendedora en el mismo período según el índice de ‘Global Entrepreneurship Monitor’ y la universidad de Babson. Existen excelentes testimonios como el emprendimiento de “Bolsa Rosa” de Ana Lucía Cepeda. Bolsa Rosa es la primera y única empresa en Latinoamérica experta en tendencias laborales y flexibilidad laboral donde se vinculan a mujeres/mamás profesionistas en empleos con esquemas de trabajo flexibles. Muchas compañías internacionales y nacionales acceden a esta bolsa de trabajo, la cual cuenta con una plataforma directa para crear un vínculo entre las empresas y mujeres. El levantamiento de capital, la obtención de varios premios y reconocimientos a nivel mundial han fortalecido el crecimiento de la iniciativa e institución.

El emprendimiento y el desarrollo de las PyMEs son entes ligados y dependen de cinco pilares clave. El primer factor es el número de personas con ideas brillantes y voluntad de emprender para generar valor para un mercado específico. El financiamiento empresarial, la disponibilidad de recursos financieros (capital social y deuda) para pequeñas y medianas empresas, incluidas subvenciones y subsidios, es también muy fundamental para el crecimiento de la economía y la generación de empleos. En tercer lugar, las políticas gubernamentales deben apoyar el espíritu empresarial como un tema económico relevante. Además, la inversión en I+D generará nuevas oportunidades comerciales en especial para el ecosistema de las PyMEs. Los programas gubernamentales y de la iniciativa privada deben hacerse presente e implementarse con calidad. Felicito a Rogelio de los Santos, Astrid Chedid, Mario García Dávila y Sofia Machuca por traer el programa Founder Institute de Silicon Valley a Monterrey y haber graduado exitosamente el jueves pasado emprendimientos en múltiples industrias. Como mentor en este programa pude testificar el espíritu disruptivo de talento local en las industrias de Tratamiento de Agua, Automotriz, Salud, eCommerce, TI, Farmacéutica y Biotecnología. Founder Institute es el programa acelerador de startups pre-semilla más grande del mundo, el cual ha ayudado a lanzar más de 5 mil empresas en más de 200 ciudades y seis continentes. En total, los alumnos del Founder Institute han recaudado más de $1.5 mil millones de USD y tienen ya una valuación estimada de esas empresas de más de $30 mil millones USD. Emprendedores/as únanse a programas como Founder Institute Monterrey, Guadalajara o Ciudad de México. Otro programa ejemplar que gracias a Eugenio Reyes está teniendo un auge es el de la Fundación Wadhwani, que brinda asesoría gratuita a PyMEs del estado de Nuevo León con el objetivo de duplicar su producción y mejorar el empleo. El World Trade Center Monterrey y la Fundación Wadhwani, la cual es de India, firmaron un convenio de colaboración que permitirá a los y las empresarios/as estatales recibir asesoría de expertos de firmas internacionales. La plataforma de mayor impacto de emprendimiento en América Latina ha sido INCmty, que durante los últimos nueve años ha desarrollado una comunidad de más de 80 mil miembros a través de su festival anual y múltiples nuevos programas de aceleración del ecosistema en distintas ciudades principalmente en México y Texas. El último evento de High Impact INCmty en Austin fue un gran éxito y la conexión con las firmas nacionales e internacionales de “private equity” y “corporate venture capital” ha sido el mayor acierto por la conexión de las ideas con la inversión. Los sectores estratégicos de alta tecnología, sustentabilidad, salud e impacto social muestran el enfoque circular que deben tener estas iniciativas.

Son muy buenas noticias e iniciativas, aun así se deben empujar aún más los temas de emprendimiento y desarrollo de PyMEs con mucho más sentido de urgencia y prioridad. En el mundo estamos viviendo el siglo de la disrupción. La disrupción digital, financiera y en las cadenas globales de valor traen oportunidades enormes para nuevos modelos de negocio en todas las industrias. Nunca en la historia de los negocios se había visto tantas empresas volviéndose un unicornio o pegasus en tan poco tiempo. Especialmente en Asia hay una velocidad impresionante de creación de empresas disruptivas. Parece que los relojes allá corren más rápidos. Los países que no incluyen el emprendimiento desde su base y no lo ligan con la inversión y el financiamiento, van a perder bienestar y poder económico. ¿Están conmigo? Manos a la obra amigos, con mejor enfoque y mayor colaboración entre todos. Querer ser el “nuevo Silicon Valley” sólo se logra con una estrategia bien coordinada y una ejecución impecable durante varias décadas. México, en especial Nuevo León, tiene el potencial y el talento humano para ser un referente a nivel mundial.

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