Durante el año pasado, el costo de la violencia en Nuevo León registró un incremento de 11.2 por ciento respecto al reportado durante el 2020 y representó el 8.8 por ciento del Producto Interno Bruto, señaló el Índice de Paz México 2022.
“El impacto económico per cápita de la violencia en Nuevo León el año pasado fue de 35 mil 927 pesos, lo que implica que en total este costo fue de 204 mil millones de pesos, representando el 8.8 del PIB por ciento en pesos constantes del 2021″, indicó el Instituto para la Economía y la Paz (IEP), que elaboró este estudio.
Destacó que este impacto subió 33 por ciento en 2021 respecto al 2015, mientras que del 2020 al 2021 subió 9.7 por ciento.
El IEP señaló que la mayor mejora en la paz en 2021 se presentó en Colima, Chihuahua, Tabasco, San Luis Potosí y Sinaloa y en contraste, Sonora, Zacatecas, Nuevo León, Morelos y Michoacán registraron los mayores deterioros.
Resaltó que en particular, estos cinco estados han sido testigos de una incursión del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en los últimos años.
Dentro del rango de paz, Nuevo León registró una calificación de 2.802 puntos, lo que la ubica en la posición número 21 como la entidad más pacífica, lo que implicó una caída de tres puestos, pues en el 2020 estaba en la posición 18.
“Como se muestra, cuatro de los cinco estados descendieron solo un lugar en la clasificación. El estado restante, Nuevo León, cayó tres lugares, el mayor cambio de clasificación de cualquier estado”, indicó el IEP.
“En 2021, Nuevo León registró el tercer mayor deterioro de la paz en México, cayendo del puesto 18 al 21 en las clasificaciones. Esta disminución estuvo impulsada por deterioros sustanciales en los crímenes de la delincuencia organizada, los homicidios y los delitos con violencia, mientras que se registraron ligeras mejoras en los indicadores de delitos cometidos con armas de fuego y en la cárcel sin sentencia”, agregó el organismo.
Así, respecto a homicidios, el Estado registró un índice de 1.943 puntos, delitos con violencia de 3.281 puntos, delitos cometidos con armas de fuego de 2.457, crímenes de la delincuencia organizada de 4.404 puntos, cárcel sin sentencia de 1.419 unidades.
El IEP destacó que el número de homicidios aumentó un 17 por ciento para alcanzar una tasa de 18.8 por cada 100 mil habitantes, la tasa más alta desde 2015.
Agregó que las tasas de delitos con violencia también aumentaron un 17 por ciento, impulsadas por aumentos en las tasas de asalto, violencia sexual y violencia familiar, en tanto que la tasa de los crímenes de la delincuencia organizada experimentó el mayor aumento de cualquier indicador, subiendo un 37.9 por ciento.
“En esta categoría, el aumento más significativo se dio en el secuestro y la trata de personas, que aumentaron en un 76.4 por ciento”, añadió.