El Contador Público es el profesionista responsable de las actividades relacionadas con el registro contable de los contribuyentes, y para poder hacerlo, necesita investigar, o en su caso, solicitar el detalle del tipo de operación que realiza la empresa, la forma en la que se financia, los sujetos que participan (y en su caso, el beneficiario controlador), entre otros elementos clave.
Por esta razón, el rol del Contador es fundamental en la prevención del lavado de dinero, puesto que puede detectar una operación ilegal, o recursos ilícitos que pretendan integrarse al sistema financiero.
Según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), los recursos ilícitos podrían provenir de actividades ilegales como son: tráfico de drogas, corrupción, fraude, trata de personas, evasión fiscal, prostitución, extorsión, piratería, contrabando de armas, así como el terrorismo.
En México, desde julio del 2013, entró en vigor la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita (mejor conocida como Ley Antilavado o LFPIORPI por sus siglas), que tiene por objeto prevenir y detectar operaciones que involucren recursos de procedencia ilícita.
En dicha Ley se incluyen una serie de actividades consideradas como Vulnerables, en las que el sujeto obligado debería identificar a sus clientes, y en su caso, presentar aviso, si exceden los umbrales establecidos. Dentro de dichas actividades se encuentran: servicios de construcción o comercialización de inmuebles, renta de bienes inmuebles, préstamos, comercialización de vehículos, operaciones con activos virtuales, entre otras.
Con la intención de que los Contadores puedan apoyar a sus clientes, o bien en la empresa donde prestan sus servicios, es necesario que comprendan cómo funciona el lavado de dinero, los riesgos que enfrentan y como pueden atenuarlos, por lo que el IFAC (International Federation of Accountants) ha publicado 9 guías básicas en su Portal sobre el actuar que se espera de los profesionistas en materia contable.
La información que se establece en cada guía es la siguiente:
1. Introducción
2. Un enfoque basado en el riesgo
3. Formación de la empresa
4. Transferencia de activos
5. Asesoría tributaria
6. Empresas en dificultades
7. Activos virtuales
8. Tendencias delictivas
9. Herramientas para defenderse
También destaca en este tema, que el pasado mes de julio, el SAT incorporó un minisitio de prevención del lavado de dinero en su Portal, con el propósito de informar y orientar a aquellos sujetos que se encuentren obligados porque realizan Actividades Vulnerables.
Es importante mencionar que México forma parte del GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional) desde el año 2000, y ha estado implementando las recomendaciones que le han hecho, con la intención de combatir el blanqueo de capitales.
Por lo anterior, se sugiere que los Contadores sigamos siendo agentes de cambio en las organizaciones, y brindemos la asesoría pertinente y oportuna sobre prevención del lavado de dinero a nuestros clientes, con la intención que implementen los controles necesarios y desarrollen una cultura de prevención, que les permitirá optimizar sus recursos y evitar sanciones por parte de la autoridad.
Para finalizar, es importante señalar que las sanciones por incumplimiento son muy altas, por lo que se recomienda a las empresas que se apoyen con un contador fiscalista que pueda asesorarlos sobre este tema, así como, con el debido cumplimiento de las obligaciones que tienen, si son considerados sujetos obligados conforme a la Ley Antilavado.
La autora es Dra. y C.P.C. Miembro de la Comisión de PLD del ICPNL.
Contacto: direccion@gurufiscal.com.mx