Monterrey

Marcela Chavarría: Prevenir y erradicar la violencia de género nos corresponde a todos

Según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública cada día 11 mujeres son asesinadas en nuestro país.

Hoy por hoy, la perspectiva de género ha cobrado relevancia en todos los ámbitos de la sociedad. Desde la agenda legislativa hasta la judicial. Asimismo, el activismo de la sociedad civil organizada ha abrazado el reto de visibilizar la violencia de género, acompañar a las víctimas y demandar a las instituciones para que ejerzan el mandato constitucional de respetar y garantizar los derechos humanos, así como a investigar, sancionar y reparar las violaciones a estos.

Adicionalmente, otro de los actores que han materializado acciones claras son las instituciones educativas, que a partir de la entrada en vigor de una nueva Ley General de Educación Superior asumimos el compromiso de realizar acciones formativas y de capacitación en materia de derechos humanos, incorporar de manera transversal la perspectiva de género, promover la cultura de la denuncia de la violencia de género y contar con una instancia para la igualdad de género.

La pregunta que surge es, ¿por qué ha cobrado tal relevancia el tema? Y la respuesta es clara, ya que emerge de una demanda de la sociedad por el problema tan grave de violencia de género que vivimos.

Por ejemplo, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública cada día 11 mujeres son asesinadas en nuestro país. También, 23 de las 32 entidades federativas de México, se encuentran bajo la declaratoria de Alerta de Género establecida en es decir, requieren generar acciones de emergencia por parte de gobierno, para enfrentar y erradicar la violencia feminicida, de acuerdo con la Ley para garantizar una vida sin violencia para las mujeres, que pugna por su desarrollo y bienestar conforme a los principios de igualdad y de no discriminación.

Pero ¿a quién le compete abordar esta situación? A todas y todos.

En la UDEM, hemos asumido el compromiso de educar en la igualdad, inclusión y equidad; nos corresponde fomentar la reflexión y el análisis crítico de las necesidades que vivimos como sociedad, con una visión basada en valores, que nos permita fortalecer el respeto a la dignidad de todas las personas, para la construcción de una sociedad, libre, justa e incluyente.

Muestra de ello ha sido la creación del Centro de Equidad de Género e Inclusión que ha respondido a la necesidad de contar con una instancia especializada en prevenir y erradicar la violencia de género, cuyo reto es construir espacios seguros e incidir de manera positiva en una mejor sociedad.

Para cumplir con nuestra misión, trabajamos en tres ejes clave: la vinculación, mediante la cual buscamos crear alianzas con otras instancias para investigar e incidir en la materia; la atención de casos y acompañamiento como está definido en nuestro Protocolo para la Prevención y Atención de los Casos de Violencia de Género; y la formación, a través de la que propiciamos espacios de encuentro, diálogo y educación en un ambiente de confianza y respeto recíproco.

Y es precisamente a través de este último eje que, por tercer año consecutivo, realizamos la Semana Morada, un evento dentro del marco del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer en la que ofrecemos una serie de actividades como conferencias, paneles y talleres enfocados a sensibilizar a todas las personas en la importancia de erradicar la violencia de género y a generar compromisos puntuales.

La violencia de género es un problema público que repercute en todas las personas que integramos la sociedad. Ergo, no puede buscar atenderse únicamente desde una visión de trabajo para las mujeres, ya que los hombres forman parte de la ecuación a la hora de atender esta problemática.

Continuar trabajando en acciones con un enfoque preventivo tendientes a la construcción de espacios seguros, en donde promovamos el respeto a la dignidad de las personas como eje de nuestro actuar, debe ser nuestra tarea desde lo individual hasta lo colectivo.

Una comunidad segura e incluyente la construimos todas las personas.

La autora es egresada de la Licenciatura en Derecho de la Universidad de Monterrey, cuenta con un Doctorado en Derecho por la Universidad Carlos III de Madrid. Actualmente se desempeña como Directora del Centro de Equidad de Género e Inclusión de la UDEM y profesora de la asignatura de Derechos Humanos en la Escuela de Derecho y Ciencias Sociales de la misma institución.



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