Si bien la transformación digital, que se vino a acelerar con la pandemia, requiere de un mayor número de dispositivos conectados a mayor velocidad de transmisión y una menor latencia, como la red 5G, esto implica riesgos en temas de ciber seguridad para cualquier actividad económica que se desarrolle, por ello es necesario que todos los poderes de Gobierno “le entren al toro”, consideró David Taboada Garza, presidente del Consejo de Seguridad de la Información y Ciberseguridad (ConsejoSI).
El experto destacó que actualmente el negocio del cibercrimen es mucho más grande que el mismo narcotráfico o de todos los agentes que se dedican a ofrecer ciberseguridad en el mundo.
“El negocio del cibercrimen es más grande que el negocio que de los que ofrecen ciberseguridad. Si sumamos la facturación de todos los que se dedican a vender cosas relacionadas con la ciberseguridad, generan menos que lo que genera el cibercrimen”.
“En el 2021 se estimó que los daños del cibercrimen ascendieron a 6 billones de dólares, a nivel mundial y se espera que para el 2025 la cifra suba 10.5 billones de dólares. El cibercrimen es más grande que el narcotráfico en el mundo”, resaltó.
Actualmente en México se castigan los delitos informáticos de índole doméstico, sin embargo, los de alcance internacional aún no reciben castigo alguno, por lo que es necesario que el país se adhiera con plenos derechos al convenio de Budapest, donde actualmente solo es un observador.
Este convenio tiene la finalidad de homologar los tipos de delitos penales entre diversos países.
“Es importante que haya una ley en México y que al menos los delitos domésticos se resuelvan, pero hace falta también mucho relacionado con a la diplomacia para establecer acuerdos de cooperación”.
“Sí hace falta legislación que impulse no solo en el tema penal, la ciberseguridad en todos los órdenes de la nación, hace falta que México se adhiera con plenos derechos, al convenio de Budapest”.
“Sí hay leyes que castigan delitos informáticos (…) el problema es la impunidad”.
Por todo ello, Taboada Garza recomendó a cualquiera que sea el giro del sector productivo como industria, educación, organizaciones, sector salud que tengan conexión a internet, a tomar medidas para reducir los riesgos de ataques y evitar que su operación se vulnerada.
“En la medida en la que impulses la digitalización (…) todo lo que traiga el apellido digital necesita ir acompañado de un segundo apellido que sea seguridad, si no, sería irresponsable porque amplías la superficie de ataque sin irla protegiendo.
“El asunto con el cibercrimen es que como es automatizado una persona puede ir creciendo en ordenes de magnitud su capacidad de ataque y, y son los mismos, lo que pasa es que cada vez usan tecnología más sofisticada porque el negocio es grandísimo”.
Enfatizó la necesidad de que el país tenga una política de estado en materia de ciberseguridad transversal.
“Por ejemplo, se necesita que la Secretaría de Relaciones Exteriores haga una parte porque tiene que lograr colaboración con otras naciones”.
“La Secretaría de Economía tiene que impulsar el desarrollo de las capacidades en la economía de la ciberseguridad porque (las bandas de cibercriminales) están saqueando el país, hay millones de dólares que están saliendo del país (…) lo que pasa es que nadie dice nada porque encima de que te hackearon y robaron el dinero lo último que quieres que suceda es que la gente se entere y luego no te tengan confianza para transaccionar contigo porque eres inseguro. Se tiene que proteger al aparato productivo que está en riesgo”, destacó.
Entre más se tarden “en entrarle al toro” las pérdidas se irán acumulando, dijo.