Monterrey

Rosa Morales: IED, talento humano y crecimiento económico en AL

Los países de América Latina más competitivos atrayendo inversión extranjera en el 2021 fueron Brasil y México.

Rosa Morales

Uno de los factores clave a estudiar cuando se analiza la competitividad de una región o su crecimiento económico, es la inversión extranjera directa. Existe cierto consenso en afirmar que la inversión extranjera directa genera crecimiento económico, y que el efecto es mucho mayor cuando esta inversión interactúa con un adecuado acervo de talento humano. Estamos hablando de inyecciones de capital extranjero que contribuyen a la economía de un país a través de la producción de más bienes y servicios que pueden tener un efecto mayor si el país receptor tiene talento humano que potencie dichos flujos.

Dado que los países o regiones intentan crecer económicamente, compiten entre sí por atraer fondos extranjeros que les permita dinamizar o complementar las inversiones locales. Mientras más confianza haya en un país o más atractivas sean ciertas industrias, es más probable que atraigan inversión extranjera directa. De hecho, la inversión extranjera directa es usada como un indicador contextual que complementa los índices de competitividad del Foro Económico Mundial.

Los países de América Latina más competitivos atrayendo inversión extranjera en el 2021 fueron Brasil y México. De acuerdo con el Reporte Mundial de Inversión de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD) estos países latinoamericanos ocuparon los lugares nueve y diez respectivamente en la atracción de inversión directa extranjera a nivel mundial. Ningún otro país de América Latina aparece en los primeros veinte lugares. Se espera que la inversión extranjera en Brasil y México pueda contribuir al crecimiento de estos.

Los retos que enfrentan ambas naciones para aprovechar estas inversiones y transformarlas en beneficio de la sociedad son variados. Por ejemplo, recientemente se anunció que una de las empresas con mayor liderazgo en la industria de los semiconductores, Intel, planea ampliar sus inversiones en el mercado latinoamericano. En particular, en México y Brasil. Previamente, ya Intel tenía operaciones en Costa Rica.

La importancia de este tipo de inversiones es que básicamente esta industria moviliza la economía digital o economía moderna a través de la producción de chips. Obviamente, este tipo de inversiones podrían significar un gran avance para las economías mexicanas y brasileñas. Sin embargo, se ha mencionado que uno de los retos para retener e impulsar estos flujos de capital está en el adecuado acervo de talento humano de ambas naciones.

México y Brasil son dos gigantes latinoamericanos, en términos de tamaño de mercado, que para seguir potenciando el crecimiento económico y la competitividad deben estar atentos al capital humano y a las habilidades que necesitan para retener las inversiones extranjeras y crecer.

De acuerdo con el Banco Mundial, en el año 2020, ambos países tenían un índice de Capital Humano (ICH) de 0.6, por debajo del valor de ICH de Chile con un 0.7, en un rango de 0 a 1. Con este índice se intenta comprender las habilidades, la salud, el conocimiento y la resiliencia de las personas de un país.

Estudiar estos componentes tanto en México como en Brasil podría dar señales de hacia dónde dirigir los instrumentos de políticas públicas que fortalezcan el capital humano y dinamicen las interacciones con las inversiones extranjeras, de tal forma de hacerlas sostenibles a través del tiempo.

La autora es Dra. en Economía por la Claremont Graduate University, en Claremont, California y académica de la Escuela de Negocios de la Universidad de Monterrey.

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