La economía circular es un sistema industrial que busca cambiar la forma de producir, que es predominantemente lineal, basada en el uso indiscriminado de los recursos naturales que, en el largo plazo, se agotarán. Producir, usar y tirar es la forma más natural de este modelo lineal, donde las empresas ganan al producir y vender cada vez más productos, usando más recursos. Esto es inviable el día de hoy.
La economía circular busca modificar la forma de producción industrial lineal, por una forma de producir con un enfoque restaurativo y regenerativo desde el diseño de los productos. No basta con producir los bienes, sino que ahora las empresas deberían pensar en que forma se van a disponer los residuos de los productos que venden y de que manera se puede llegar a reutilizar, remanufacturar y reciclar sus componentes. La intención es regenerar las fuentes naturales donde se obtienen las materias primas y restaurar los procesos de producción hacia un modelo de sustentabilidad.
En ese sentido, se han hecho muchos esfuerzos en el mundo y empresas como Winnow, DyeCoo, Close the Loop, Enerkem, Schneider Electric, Cambrian Innovation, Lehigh Technologies entre otras, están dando el ejemplo sobre como es posible producir, tratando de usar eficientemente los recursos, con grandes esfuerzos en la reutilización, reaprovechamiento, remanufactura, reducción, reciclaje y dándole un tratamiento adecuado a los residuos propios de sus procesos productivos.
Pero en México también tenemos ejemplos de empresas que han realizado un gran esfuerzo en su transformación industrial hacia la economía circular, que vale la pena mencionar.
Grupo AlEn es una empresa de Monterrey que hace productos de limpieza y los vende en todo el mundo. Es propietaria de marcas tan conocidas como Pinol, Cloralex, Ensueño, entre otras. Como su producción requiere de uso de materias primas que utilizan agua, se dio a la tarea de certificar a sus 15 plantas productoras como industrias limpias ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente. Además, decidió crear un parque agroforestal para la producción sostenible de palma y pino, donde puso una planta de beneficio de esta, que es autosostenible en energía eléctrica y uso de agua.
Los beneficios económicos que genera esta iniciativa de economía circular son la producción sostenible, la creación de empleos, el desarrollo de pequeños proveedores, la reforestación, la captura de dióxido de carbono, la conservación de especies y la innovación tecnológica.
Otro ejemplo en materia de economía circular lo tenemos en Arca Continental, empresa multinacional con base en Monterrey, productora de bebidas bajo la marca de The Coca Cola Company. Su propuesta de economía circular es la creación de un humedal en Jalisco, que es capaz de tratar más de 3 millones de litros de agua de uso humano de la comunidad. Mediante un proceso llamado Biomimesis, el humedal trata el agua residual mediante procesos como la introducción de plantas acuáticas que capturan bacterias y luego pasa por un sistema de luz ultravioleta y la hace 100% utilizable nuevamente.
La intención es hacer 4 humedales de este tipo en todo el país para regenerar el agua y beneficiar a más de 50 mil personas. Además, Arca Continental ha gestionado los temas ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG), de tal manera que le han permitido tener sus acciones en índices sustentables como Dow Jones, MSCI y S&P de la Bolsa Mexicana de Valores.
Es importante también poner el ejemplo de la Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma, que ahora es Heineken México. Esta empresa, también de Monterrey, tiene un fuerte compromiso con la circularidad y decidió hacer todo un complejo de producción sustentable en Meoqui, Chihuahua. Este ecosistema de economía circular es muy ambicioso porque pretende reducir en 50% el uso de energía térmica, reducir en 30% el uso de agua nueva, usar el 100% de su energía eléctrica de fuentes renovables, tratar el 100% de sus aguas residuales y meterla dentro de sus procesos productivos para convertirse en empresa neutral en agua, reutilizar la cebada gastada para producir alimento de ganado, bioplástico y composta, reducir la huella hídrica de la cerveza, reutilizar los exhaustos de vapor y aumentar el uso biogás en sus procesos térmicos.
Con esta proyecto, Heineken México se convertiría en la empresa más circular de México, beneficiando a trabajadores, contribuyendo al desarrollo de la comunidad, creando valor para los accionistas, aumentando su reputación empresarial, que le permitirá cumplir con su enfoque ESG.
Si bien hay muchos más ejemplos, estos tres casos son encomiables y son un buen referente de lo que las empresas pueden hacer en el tema de economía circular en México.
El autor Director del Departamento Regional de Contabilidad y Finanzas del Tecnológico de Monterrey y tiene el International Sustainable Finance Certificate. Su correo es edcarbaj@tec.mx