La gestión de los desechos sólidos de manera responsable es una necesidad universal que atañe sin lugar a duda a todas las personas que habitamos este planeta. Si analizamos los datos mundiales y detallamos en México sobre los Residuos Sólidos Urbanos generados, podemos dimensionar la importancia de esto y podemos identificar quienes ya destacan por buen manejo de residuos.
En México la Ley General Para La Prevención Y Gestión Integral De Los Residuos (LGPGIR), define a los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) como los que son generados en las casas habitación: materiales que se utilizan en actividades domésticas, productos que se consumen y sus envases, embalajes o empaques; también son considerados como residuos sólidos urbanos, aquellos que provienen de establecimientos o vías públicas con características domiciliarias, así como los resultantes de la limpieza de las vías y lugares públicos, siempre que no sean considerados por esta Ley como residuos de otra índole.
Según el informe del Banco Mundial titulado What a Waste de 2018, en el mundo se generan anualmente 2,010 millones de toneladas de desechos sólidos municipales, y al menos el 33% de ellos no se gestionan de manera adecuada. Lo cual ocasiona diversos tipos de contaminación en nuestro ecosistema, afectando océanos, obstruyendo drenajes, trasmitiendo enfermedades, entre otras.
Por su parte, el informe ambiental 2020 de SEMARNAT, señala que la generación de residuos en México a nivel nacional es de 120,128 toneladas por día; de los cuales se recolectan 100,751 toneladas que corresponden al 83.87% de cobertura a nivel nacional. Cabe destacar que, de ese porcentaje recolectado, solo el 31.56% es susceptible de aprovechamiento, siendo el 46.42% de ese porcentaje residuo orgánico.
Respecto al panorama internacional, el Banco Mundial nos muestra datos muy interesantes respecto a la generación de residuos por regiones, siendo Asia el continente con mayor generación de residuos con 860 millones de toneladas anuales, y ocupando América Latina el 5to lugar de mayor generación de residuos con 231 millones de toneladas anuales. A nivel mundial se genera un total de 2,017 millones de toneladas anuales.
Ante tales cifras, destacan también los métodos que se utilizan para la correcta disposición de RSU, por ejemplo, los países de ingreso mediano alto y alto, proveen servicios casi universales de recolección de residuos en donde más de la tercera parte de los desechos se recuperan a través del reciclado y el compostaje. En cambio, en los países de ingreso bajo, se recicla tan sólo el 4% a nivel nacional.
Entre los procedimientos de gestión de los residuos que más destacan en los países de alto ingreso se encuentran el reciclaje, compostaje, incineración con recuperación de energía, incineración sin recuperación de energía y vertederos.
De igual forma, en la región de América Latina los procedimientos más frecuentes son vertederos controlados y a cielo abierto, reciclaje, relleno sanitario, digestión anaeróbica, compostaje e incineración.
Particularmente en México, diariamente se recolecta de forma separada solo el 5% de los residuos generados, siendo un total diario de 5,281 toneladas de residuos, de los cuales 2,062 toneladas son residuos orgánicos y 3,219 toneladas son inorgánicos. Además, existen a lo largo de todo el país 47 plantas donde se realizan los siguientes procesos según datos de la SEMARNAT: 26 de separación o reciclaje, 19 compostaje, 13 compactación, cinco de trituración y cinco de biodigestión. Habrá que ver en algún momento los casos del estado de Nuevo León con el municipio de San Pedro Garza García que cuenta con la ruta de reciclaje y el municipio de Monterrey que recientemente inició el programa de “Revive el Centro”.
Ante tal situación, es importante que los Gobiernos tomen medidas urgentes para abordar la gestión de los desechos en beneficio de su población y el planeta. El Banco Mundial prevé que la generación de RSU para el año 2050 sea de 3,400 millones de toneladas por año, 69% más de lo que se generaba en 2018, según informe del Banco Mundial What a Waste.
En la medida que siga el crecimiento poblacional y la extensión de las ciudades y zonas metropolitanas, se deben implementar medidas de gestión de residuos con base en economía circular, pero sin dejar la adecuada disposición final de aquellos residuos que ya no son sujetos de algún tipo de valorización. Para lograrlo, resulta fundamental que gobiernos, industrias y ciudadanos colaboren en unidad para migrar a este nuevo modelo con un criterio de sostenibilidad, es decir, siempre que sea económica, ambiental y socialmente adecuado.
El autor es Consejero delegado de economía circular de COPARMEX nacional y Presidente de la Comisión de Enlace Legislativo de la Canacintra.