Como consecuencia de los apagones o falta de energía que se están registrando en Monterrey y su Área Metropolitana debido a la ola de calor que padecen, se ponen en riesgo la operación de los pequeños comercios, pues en muchos casos se les descomponen los enfriadores, señaló Cuauhtémoc Rivera.
El presidente de la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) comentó que además de esto, los pequeños comerciantes también están sufriendo por la delincuencia en la entidad.
“Los apagones han estado muy presentes en muchos sectores de la metrópoli en la ZMM y esto ha afectado en muchos sentidos a la actividad comercial, por un lado pone en riesgo la operación del negocio pues se han descompuesto muchos enfriadores, ya que en muchos lugares no se tienen los reguladores que los protejan de las variaciones de voltaje”, indicó.
“Ha habido picos en el suministro de la luz, muchas veces la electricidad va y viene y eso pone en riesgo estos aparatos, se han echado a perder productos, es difícil manejar el segmento de los frescos, porque de alguna manera las fruta y las legumbres se maduran más rápido y pierden valor y se tiene que vender más barato y hay pérdida, y muchas veces la pérdida es total”, añadió.
Rivera detalló que en general los factores de inseguridad en Monterrey y en el AMM lamentablemente también están muy presentes y esto se muestra en los asaltos a la tiendas y en el cobro de piso.
“Hemos tenido noticias de asaltos con violencia, incluso algunos decesos, vemos que muchos delitos están presentes en la vida cotidiana de los regiomontanos”, señaló.
Detalló que como consecuencia de estos factores, en Monterrey se ha padecido una inflación alimentaria importante, los alimentos están caros, y en general la vida en NL es cara.
Respecto al delito de cobro de piso, el líder de los comerciantes dijo que éste se presenta prácticamente en todo el país, aunque hay algunos estados donde es más recurrente.
“El cobro de piso se registra en los estados de Baja California, Baja California Sur, Zacatecas, zonas de Tamaulipas, de San Luis Potosí, en la región del Bajío en lo que viene siendo el estado de Guanajuato, colindancias con Querétaro en el Estados de México, en la CdMx, en Colima, en Guerrero, en Morelos, Puebla y Tlaxcala”, dijo.
Comentó que realmente este delito es una práctica que lo más grave es prácticamente un impuesto por el derecho a trabajar que poco a poco se ha ido normalizando, se da por sentado y la gente termina por no quejarse.
Detalló que el cobro de piso va desde 500 pesos por quincena o al mes, dependiendo del tamaño y éxito del negocio, pero que los delincuentes ya no se conforman con 200 pesos.