Gracias a las ventajas del TMEC, nuestra región se ha posicionado como de gran valor estratégico para los nuevos proyectos que llegan a México, captando según datos del Gobierno del Estado de Nuevo Leon, el 72% de la inversión extranjera que llega al país.
Dentro de un estudio realizado por Consejo de Empresas Globales de México, se espera que el Nearshoring genere de entre 2 a 4 millones de nuevos empleos para 2030; lo que potencializará uno de los retos actuales más importantes para los especialistas de Capital Humano: la búsqueda y retención del talento.
Los esfuerzos por atraer personal son cada vez más costosos y la inversión de tiempo es cada vez mayor. Actualmente, vemos como a las empresas de manufactura les cuesta más trabajo convencer a sus candidatos de que su empresa es la mejor opción, y con el boom de las redes sociales, es realmente sencillo para los candidatos investigar a las empresas, los grupos en páginas como Facebook se han vuelto los sitios favoritos para ciertos candidatos que intentan mejorar sus opciones de empleador, en estos sitios, candidatos comparten libremente sobre sus experiencias haciendo procesos de ingreso, detalles del clima laboral, sueldo y prestaciones, entre otras cosas.
Definición y Ventajas
La marca empleadora o employer branding, es la imagen o “reputación” que tiene una empresa no sólo al exterior, también la imagen que tienen los empleados y cómo perciben o valoran el trabajar para esa compañía; si podemos definirlo así, es la totalidad de la experiencia laboral.
Ante un tipo de mercado laboral tan aventurero y retador como el que tiene actualmente nuestra región, una opción clave para las empresas es trabajar en su marca empleadora. Crear la estrategia correcta puede lograr influir, controlar o cambiar la percepción de su empresa, dándole la oportunidad de crear una reputación que atraiga y retenga al talento indicado para su organización.
Dentro de las muchas ventajas de tener una buena marca empleadora podemos resaltar las siguientes:
· Motivación y fidelidad de los empleados actuales
· Contribuye a la transmisión de valores y cultura organizacional positiva
· Disminución de la rotación de personal
· Disminución de los costos para la captación de personal
· Posicionamiento de marca, prestigio social
¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra marca empleadora?
El éxito en la tarea de mejorar la marca empleadora se basa en la experiencia del empleado, de esta manera lograras que tus empleados sean tu principal referencia por lo que puedes comenzar por tu propuesta de valor.
Identifica qué es lo que hace atractiva tu organización, no todo es totalmente malo ni totalmente bueno, realiza con tu equipo una lista de virtudes por las cuales la gente se queda a trabajar para tu empresa. Utiliza la información con la que ya cuentas, recaba datos de tus métricas, revisa tus encuestas de clima o tus encuestas de salida y si es posible, realiza encuestas de pulso a tu personal con cierta antigüedad en la compañía.
Es importante identificar también tus áreas de oportunidad, que desventajas tienes contra el mercado, ya que habrá cosas con las que podrás trabajar para mejorar.
La comunicación es clave, puedes usar las mismas redes sociales además de softwares internos de comunicación, pero siempre de manera positiva, resaltando los logros y las actividades de reconocimiento a los empleados.
Comparte publicaciones que transmitan los valores de la organización, la cultura, eventos sociales y de reconocimiento, esto puede ser de valor para un empleado potencial y ayuda con el sentido de pertenencia de tus empleados actuales.
Conecta con tus empleados de principio a fin. Trabaja con un buen plan de onboarding y capacitación inicial, fomenta el trabajo en equipo y la colaboración entre áreas, coordínate con los líderes de tu organización para que te sigan en esta fase.
Lo mas importante es ser congruentes, asegúrate que lo que compartimos este realmente alineado a los valores y políticas de la organización, trabaja con tu equipo de marketing si lo tienes para unificar la comunicación. Recuerda que si no actuamos lo que decimos, el resultado puede ser a la inversa.