Dado que México está considerado como el país en donde se comete el mayor número de ciberfraudes en toda América Latina, especialistas consideran que esta situación pone en riesgo al nearshoring en el país.
“La ciberseguridad es cada vez más un riesgo importante, sobre todo para las empresas internacionales y sus proveedores, que participan en México en el fenómeno del nearshoring, especialmente si tomamos en cuenta que nuestro país fue el blanco del 66 por ciento de los ciberataques en América Latina entre 2021 y 2022″, dijo Pablo Gutiérrez.
El presidente de la Comisión de Ciberseguridad de la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (AMESP) destacó que la falta de conciencia en cibserseguridad incrementa los riesgos en forma importante para estas empresas.
El directivo señaló lo anterior, al participar en el Foro Internacional Ciberseguridad e Inteligencia, organizado por la Comisión de Tecnología y la Comisión de Ciberseguridad de la AMESP, en coordinación con la Facultad de Derecho y Criminología de la UANL.
La Ciudad de México tiene el registro de más de 57 mil fraudes cibernéticos; el Estado de México más de 39 mil; Jalisco 26 mil casos y Nuevo León 15 mil 547, dijo Luis Miguel Dena Escalera, presidente de la Comisión de Tecnología y secretario general de la AMESP.
“Somos un país con un grave problema de inseguridad física; ahora a esto le debemos sumar la falta de seguridad en el ciberespacio”, añadió.
Detalló que hay empresas que sufren graves pérdidas por el impacto de la delincuencia, por robos, bloqueos, por no poder cumplir con la entrega de mercancías, por la quema de sus vehículos, además de que no pueden realizar su labor normal por las extorsiones, el cobro de piso y por una lista muy grande de afectaciones.
Ante esta situación, para Gutiérrez Salazar el ser atacado por ciberdelincuentes ya no es un “a lo mejor”, sino un hecho, algo real y cotidiano y si eres una empresa operando en México serás víctima de un ataque.
“Un ataque a la seguridad de la información puede tener efectos catastróficos como: pérdida de datos sensibles, afectaciones reputacionales, pérdidas económicas o productivas, afectaciones a clientes, multas onerosas y pérdida de acreditaciones normativas”, detalló.
Dijo que hay que considerar que la gran mayoría de empresas en México no tiene una estrategia en ciberseguridad y la falta de esta conciencia incrementa los riesgos de forma importante.
“La única solución para hacerle frente a esta amenaza es empezar con desarrollar una estrategia de ciberseguridad integral que tome en cuenta prioridades, capacidades, riesgos a corto, mediano y largo plazo y de ninguna manera proteger activos empresariales con diversas ofertas del mercado”, indicó.