En México, únicamente seis empresas están autorizadas para importar diésel y comercializarlo legalmente en territorio nacional, de las cuales cinco de ellas son firmas de Estados Unidos.
De acuerdo con información de la Secretaría de Energía (Sener) sobre los permisos vigentes a largo plazo para adquirir diésel del exterior e internarlo en el País, grandes consorcios energéticos globales como ExxonMobil, Koch Supply, Shell México, Tesoro México y Valero Marketing cuentan con una autorización para cada uno concedida a finales de 2018 con una duración de 20 años, esto es, que vencerán a finales del próximo 2038.
La información muestra que el permiso con mayor volumen es de ExxonMobil con 232.1 mil millones, le sigue Valero Marketing con 127.7 mil millones, en tanto que Tesoro, Koch y Shell pueden importar hasta 87, 60 y 34 mil millones de litros, respectivamente.
“Las empresas transportistas, mineras, del sector ferrocarril e industrias en general, en grandes ciudades como Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México (CDMEX), deben saber que, si no adquieren el diésel a estas firmas, o a Pemex, que también tiene permisos, simplemente están comprando de contrabando o “huachicol”, lo que constituye un delito con penas de 20 a 30 años de prisión”, advirtió Arturo Jiménez, asesor privado en comercio exterior, en entrevista con El Financiero.
De acuerdo con información pública revelada por Transparencia, el robo y contrabando de combustibles, conocido como “huachicol”, se ha disparado 117 por ciento en lo que va del sexenio del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) con respecto al mismo periodo de la Administración de Enrique Peña Nieto.
Por el lado del sector público hay tres permisos para dos subsidiarias de Pemex: PMI Trading con dos autorizaciones para importar diésel Ultra Bajo en Azufre (UBA) y diésel Bajo en Azufre (BA), además de PMI Transformación Industrial que puede importar hasta 216.6 mil millones de litros de diésel UBA. Los permisos para ambas empresas tienen vigencia hasta el año 2040.
“Fuera de estas empresas, nadie puede importar diésel al País so pena de enfrentar situaciones legales por delitos equiparables al contrabando”, indicó el especialista.
Jiménez explicó que a partir de abril de 2016 se comenzaron a autorizar permisos de importación del petrolífero por parte de Sener como una forma de preparación hacia la apertura del mercado ocurrida en 2018 con el objetivo de incentivar la competencia y obtener mejores precios.
Desde febrero de 2019, la dependencia comenzó a revisar los permisos con vigencia de un año pidiendo documentación sobre la proveeduría, logística y clientes para realizar la actividad permisionada al detectar que hasta 80 por ciento de ellos no eran utilizados por sus titulares, entre otras irregularidades, detalló.