Fui invitado un jueves a un evento en una pizzería en donde escuché ideas de negocios en el mundo de las criptomonedas y Web3 (la idea del uso del internet de manera descentralizada). Me sorprendió la energía y el entusiasmo de los participantes y su ferviente deseo de un sistema global descentralizado, particularmente, para el sector financiero.
Participé en estos eventos a lo largo de casi un año y me di cuenta que, la mayoría de los proyectos, no tenían ningún valor agregado importante ni resolvían problemas actuales de la economía real.
En cambio, se ofrecían inversiones con rendimientos exponenciales en monedas digitales y en proyectos virtuales. Para muchos de los participantes de estos eventos lo que dicen los líderes de su comunidad es la ley y toman decisiones sin pensar en sus consecuencias.
La comunidad para este grupo de personas es muy relevante ya que los fraudes son muy frecuentes y es importante confiar en sus líderes. A lo largo del año que participé no observé la detonación de proyectos productivos y en cambio sí me percaté que algunas personas promovían sus monedas o tokens digitales.
Una manera tradicional de hacerlo es ofrecer “giveaways” o algunas monedas de forma gratuita para generar una demanda. La demanda comienza a crecer por el entusiasmo que generan sus líderes en redes sociales hasta que deciden vender sus posiciones o liquidarlas, y llevarse todas las ganancias. Siempre existe una caída o corrección y la promesa de que en el futuro la moneda digital siempre subirá de valor.
Los participantes casi siempre son los mismos miembros de dicha comunidad que terminan con las manos vacías. Los líderes, en contraste, tienen rendimientos millonarios en cuestión, a veces, de algunas semanas.
Para detectar posibles fraudes en el mundo cripto es importante analizar varios factores antes de decidir a invertir.
Primero, ten cuidado con personas que ofrecen oportunidades de inversión de manera anónima sin decir su nombre y no tener información de quienes son. En Twitter casi todas las personas involucradas en estos fraudes se escudan en el anonimato. Segundo, ten cuidado con las cuentas que prohíben los comentarios en sus perfiles, no permitirán que hablen de sus estafas. Tercero, no des dinero ni monedas para recibir “giveaeways” y no respondas a comentarios anónimos en redes sociales ofreciendo rendimientos extraordinarios.
Finalmente, nunca abras páginas o links desconocidos, no caigas en la trampa de estar ansioso por invertir por la manipulación de otros, y siempre recuerda que, si una oportunidad de inversión es muy buena para ser verdad, probablemente lo es.
El autor es director general de Soluciones Financieras GAMMA y profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School. Tiene un doctorado en Finanzas y maestría en Economía Financiera, ambas por la Universidad de Essex en el Reino Unido.