Estimado lector, imaginemos que el SAT fuera una panadería, ¿qué tipo de panes encontraría al visitarla? En esta panadería hay una diversidad de panes sin igual. Empezaremos por describir los panes de acuerdo con los diferentes tipos de ingreso que puede tener un contribuyente.
Al entrar al lugar, lo primero que capta la atención, por el espacio que ocupa, es el tradicional pan de caja. Horneado en un molde rectangular, es práctico y siempre listo para consumir. Igual que los asalariados cuyo Impuesto Sobre la Renta es retenido de forma automática los convierte en una fuente importante y segura de recaudación.
Otro pan que no debe faltar en una buena panadería es el pan pita, un pan ligero que se adapta fácilmente a diferentes rellenos, tal como el Régimen Simplificado de Confianza, que lo pueden utilizar contribuyentes que se dedican a una diversidad de actividades que van desde el comercio, la fabricación o la prestación de servicios, y cuya forma de tributación es simple.
Uno de los panes que tiene un proceso particular de elaboración es el pan de masa madre, que requiere tiempo y paciencia para fermentarse adecuadamente. Este representa a los contribuyentes que obtienen ingresos por arrendamiento de inmuebles. Son inversiones a largo plazo que generan un ingreso constante a través del tiempo, siempre y cuando se administren de forma correcta.
Otro pan que requiere un cuidado especial es el pan de hojaldre, hecho de muchas capas con una masa crujiente, tal como los ingresos por intereses, que en cada vencimiento se pueden acumular al principal. A su vez son muy frágiles, ya que una variación en la tasa de interés o en la inflación pueden mermar su atractivo.
Un pan deseado por muchos y probado solo por algunos paladares es el pan multigrano. Solo los conocedores reconocen el beneficio de combinar diferentes tipos de granos en un pan. Este pan simboliza los ingresos por dividendos, los cuales, al provenir de diversas empresas, crean una mezcla rica y variada de ingresos.
También se encuentra un pan cuya elaboración, al ser un proceso artesanal, se produce solo ciertos días y en cantidades limitadas. Este pan es conocido como rústico. Representa a los ingresos por enajenación de bienes inmuebles, cuya venta implica un proceso elaborado y metódico en el cuál interviene un fedatario público, así como un proceso para validar la naturaleza y antecedentes del bien.
Una dona glaseada siempre cae bien, no importa el momento. Al degustarla, no es extraño que las personas sonrían, incluso que mejore su estado de ánimo. Los mismos efectos los ocasionan los ingresos por premios, no importa el monto o el motivo, el simple hecho de obtener un premio es sinónimo de alegría, hasta que llega el momento de pagar el impuesto correspondiente.
Ahora describiremos los panes de acuerdo con el comportamiento o las características particulares de los contribuyentes.
Tenemos al pan integral, es completo y balanceado, beneficia el metabolismo de la glucosa y la insulina. La harina integral conserva de mejor manera las cualidades alimenticias. Este tipo de pan es una fiel representación de los contribuyentes responsables que cumplen con sus obligaciones en tiempo y forma.
La baguette es un pan francés que es conocido, producido y consumido a nivel internacional. Representa a aquellas empresas que destacan en mercados internacionales y enfrentan competencia global.
El pan con pasas, ese pan que las pasas le dan ese toque especial que disfruta el paladar, es como aquellas empresas que, ya sea por su operación cotidiana o alguna operación en particular, generan un saldo a favor de Impuesto al Valor Agregado.
No podía falta el pan de vapor, muy popular en China, que es ligero y a veces parece que no tiene mucho sustento, similar a aquellos contribuyentes que distorsionan su información de forma indebida con la finalidad de disminuir el pago de impuestos.
Al imaginar el SAT como una panadería, encontramos una variedad de panes que representan la diversidad de ingresos y contribuyentes que conforman el sistema fiscal. No cabe duda de que el manejo de una panadería de este tipo requiere una administración fiscal eficiente y justa para asegurar el bienestar económico del país. ¿Qué calificación le daría a esta panadería?
Contacto: huorsa@ortizgarza.com.mx
Historias de impuestos bien contadas