Monterrey

Julia Ruiz: La clave para la agilidad en la cadena de suministro

Estructurando equipos preparados para el entorno actual.

En un mercado donde la volatilidad y la eficiencia operativa son cruciales para maximizar la rentabilidad, las cadenas de suministro enfrentan desafíos constantes. Para superarlos, no basta con invertir en tecnología o procesos; se requiere diseñar equipos organizacionales ágiles, capaces de anticiparse y responder eficazmente a los cambios.

¿Qué es la agilidad organizacional en la cadena de suministro?

La agilidad no se trata solo de actuar rápido, sino de hacerlo estratégicamente, con base en datos, y en alineación con las metas de nuestra organización. Este enfoque implica una reestructuración del modelo tradicional de equipos, donde las jerarquías rígidas y los silos dificultan las decisiones rápidas. En cambio, un equipo ágil se caracteriza por ser:

  • Colaborativo: Los integrantes trabajan de manera transversal, compartiendo conocimientos y capacidades.
  • Flexible: Capaz de adaptarse a fluctuaciones en la demanda, interrupciones del suministro y cambios externos como regulaciones o costos de transporte.
  • Orientado a resultados: Enfocado en resolver problemas críticos alineados con la visión del negocio.

¿Cómo comenzar a estructurar equipos ágiles?

La implementación de equipos ágiles no debe percibirse como un cambio disruptivo inmediato, sino como una transición estratégica. Aquí los pasos clave:

  • 1. Identificar procesos clave y necesidades internas: Esto ayuda a priorizar las áreas críticas y definir las competencias necesarias para los roles clave.
  • 2. Mapear procesos: Realizar un mapa macro de la cadena de suministro para entender fortalezas, debilidades y oportunidades de mejora desde una perspectiva integral. Es importante asegurase de lograr una perspectiva amplia del proceso completo y buscar poner a prueba las ideas acerca de cómo “debería funcionar” para plasmar la realidad de lo que ocurre en nuestra organización.
  • 3. Involucrar al equipo en un análisis SWOT colaborativo: Permitir que los líderes y colaboradores contribuyan en la identificación de riesgos y estrategias genera compromiso.
  • 4. Diseñar roles clave con herramientas adecuadas: Asignar responsabilidades claras y asegurarse de que el equipo cuente con los recursos para cumplirlas.
  • 5. Definir un plan de transición: Incluir capacitación y soporte para garantizar una adopción exitosa del nuevo modelo.

Un punto fundamental en este proceso es fomentar la participación activa del equipo. Esto no solo fortalece el compromiso, sino que también asegura que las soluciones sean realistas y adaptadas a las capacidades existentes de la organización.

Ventajas de los equipos ágiles en la cadena de suministro

  • Mayor velocidad de respuesta: Ante interrupciones o cambios en la demanda.
  • Focalización en problemas específicos: Ofreciendo soluciones personalizadas y más efectivas.
  • Fortalecimiento del equipo: Al reducir la dependencia en un único experto y fomentar la resiliencia.
  • Impulso a la innovación: Gracias a una visión integral de la operación.
  • Capacidad de aprendizaje continuo: Los equipos ágiles tienen la habilidad de aprender de sus errores y aplicar rápidamente nuevas estrategias.

Habilitadores de la agilidad organizacional

Digitalización: Sistemas ERP y herramientas de colaboración en tiempo real permiten decisiones rápidas y basadas en datos.

Comunicación efectiva: Las reuniones breves y las plataformas digitales mantienen al equipo alineado y comprometido.

Cultura de mejora continua: Promueve la resolución de problemas y la optimización constante.

Liderazgo transformador: Los líderes de equipos ágiles ya no son supervisores tradicionales. En su lugar, actúan como facilitadores, empoderando a sus colaboradores y guiándolos hacia los objetivos estratégicos de la organización.

Empresas líderes en diversos sectores han adoptado este enfoque con resultados notables. Por ejemplo, durante la pandemia, compañías del sector manufacturero implementaron equipos multifuncionales para rediseñar rápidamente sus redes de suministro y asegurar el flujo de productos esenciales. Estas organizaciones no solo sobrevivieron al impacto inicial, sino que aprovecharon la agilidad para reforzar su posición en el mercado.

En un entorno donde el cambio es la norma, estructurar equipos ágiles en la cadena de suministro es una necesidad estratégica. Este enfoque no solo permite enfrentar incertidumbres con éxito, sino también aprovecharlas como oportunidades de crecimiento.

La autora es miembro del Comité de Cadena de Suministros en Index Nuevo León.

COLUMNAS ANTERIORES

Destaca NL en innovación en el sector de la construcción
Se expande Doña Tota de la mano de Oxxo

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.