Las plantas hidrodesulfuradoras y otras unidades de la Refinería Héctor R. Lara Sosa de Cadereyta, Nuevo León, fueron cerradas ante la disminución de la presión en el río Ramos, ya que el agua de esta fuente alimenta sus calderas, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
"Siguiendo los protocolos internos de seguridad, se llevó a paro seguro", informó el área de comunicación de Pemex a El Financiero.
La empresa informó que frente a esta situación, buscan evitar un problema de abasto de gasolinas y diesel y aseguraron que cuentan con inventarios suficientes.
"Se ha instrumentado diversas medidas para el suministro de gasolinas y diesel a los clientes de la zona de influencia de la refinería.
"La empresa realiza un esfuerzo para reactivar la operación de las plantas y reitera su compromiso de mantener el reparto oportuno de combustibles", indicó.
Pemex no detalló cuánto tiempo durará el cierre de las plantas hidrodesulfuradoras.
Monterrey