Monterrey

Etiquetado confronta al gobierno con la IP

Analistas advierten riesgos para las firmas del sector en donde operan algunas regias.

Luego de que el viernes pasado, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), se inconformó con las Secretarías de Economía (SE) y Salud (SS) y señaló que "el nuevo etiquetado no resolverá el problema de salud que sufre México sino, por el contrario, resultará en menor información disponible para los consumidores", analistas del sector alimentos y bebidas externaron su perspectiva para las empresas.

El CCE, que preside el regio Carlos Salazar Lomelín, señaló que, "a pesar de la consulta pública sobre este tema…, las autoridades responsables del proceso de normalización no tomaron en cuenta la información técnica propuesta por los productores del campo, pequeños y medianos empresarios, asociaciones de pacientes, nutriólogos y profesionales de la salud, la Comisión Federal de Competencia Económica…, además de especialistas en propiedad intelectual, entre otros, nos merecemos un etiquetado frontal".

Analistas del sector alimentos y bebidas señalaron que la medida sí tiene un impacto sobre las empresas.

Jimena Colín, analista de Grupo Financiero Monex, dijo que los esfuerzos se encaminan a concientizar a la gente a comer de manera saludable, pero otros expertos que pidieron el anonimato, señalaron que las empresas que tendrían que ser etiquetadas serían Sigma de grupo Alfa; BIMBO, Gruma y las del sector dulcero en general .

En octubre pasado, Salazar Lomelín dijo que el problema de obe sidad en México no será resuelto "poniendo etiquetas negras a los productos", pues requiere de una modificación del etiquetado: educación alimentaria, reformulación de productos y movilizar al consumidor con ejercicio.

El Financiero publicó hace unos días que "los proveedores de Grupo Jumex, Guayaberos de la Soledad y Productores de Cítricos Estación Chapopote, estimaron que caerán las ventas en concentrados de fruta, jugos y néctares".

Por su parte, la Asociación Nacional de Fabricantes de Chocolates, Dulces y Similares (Aschoco) denunció que el modelo de advertencia planteado no permite el desarrollo de las capacidades de razonamiento sobre la cantidad de nutrimentos.

Además, indicaron que no hay un piso parejo ya que el 70 por ciento de lo que consumen los mexicanos está en la informalidad.

Nestlé México solicitó un tiempo de hasta tres años para la transición de anaqueles.

Por el contrario, organismos nacionales como El Poder del Consumidor aplauden las leyendas de alerta y la propuesta de eliminar estrategias de mercadotecnia como personajes, promociones de mayor volumen por menos costo.

Hasta el momento la postura del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha sido abierta y negociadora, indican los analistas, aunque no tanto la del subsecretario de Salud, Hugo López Gatell.

En marzo del 2019, López Gatell declaró a la opinión pública que, "la intromisión de la industria de alimentos y bebidas frenó las acciones de la estrategia contra el sobrepeso, obesidad y diabetes que se aplicó en el gobierno anterior, entre otras, para diseñar un etiquetado comprensible y de alerta sobre el contenido de los productos. Esa interferencia se terminó".

Con el etiquetado aprobado el viernes pasado parece que su vaticinio se está haciendo realidad.

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