Si bien la implementación de la reforma energética el sexenio pasado abrió a los particulares la oportunidad de participar en toda la cadena de valor de refinados, hoy los expertos señalan existe una política de incremento en la refinación nacional, lo cual de tener éxito revertirá dramáticamente la tendencia de importación de combustibles por Pemex y particulares, lo que será un momento histórico y clave.
Luis González Villarreal, director de Petroland destacó que en este momento existe mucha incertidumbre en el ramo de refinados en México y el mundo.
"La demanda de gasolinas ha caído significativamente debido a las medidas sanitarias implementadas derivadas por la pandemia. Esperamos que paulatinamente se haga lo necesario y en un corto plazo tengamos una rápida reactivación económica.", explicó
Señaló que Nuevo León, por la cercanía a Estados Unidos (EU), tiene la facilidad de realizar la importación de refinados.
"Aunque este mes de julio dio inicio la política de almacenamiento mínimo de combustibles, las empresas que no cuenten con tickets o bien que no cumplan con los días de almacenamiento requerido para la distribución y/o comercialización en la región no podrán operar, generando que posiblemente veamos ajustes en el mercado", explicó.
José Antonio García Martínez, Director de Operaciones en Amerigas Propane de México, explicó que "con la llegada de la reforma energética, el sector privado ha venido incursionando en la comercialización de hidrocarburos, y funge como un apoyo para Pemex y sus importaciones, favoreciendo y beneficiando a sus proyectos actuales y futuros, siendo este el incremento de la refinación en sus actuales y próximas refinerías".
El especialista en proyectos energéticos y de hidrocarburos dijo que el alza de precios por parte de Pemex durante la pandemia, también ha generado que los diferentes grupos gasolineros y distribuidores busquen diferentes opciones para abaratar sus costos.
"Un tema en particular es el estímulo del IEPS, el cual este último mes ha sido de cero por ciento, haciendo referencia a que ese impuesto se ha venido pagando completo a pesar de que los precios de los productos refinados en EU continúan al alza, recuperándose del desplome que tuvo el petróleo en este año", señaló García.
Otros expertos advierten que si la nueva producción nacional es basada en pesos y como ha sido anunciado que se tendrán precios fijos que aumenten conforme a la inflación, posiblemente la importación será aún más inviable.
"El consumo en Estados Unidos de diésel tuvo una gran caída pero una rápida recuperación, esto nos indica que el mercado de transporte de carga e industrial sigue operativo. Si bien ha caído en algunos ramos se ha compensado con otros que ha tenido un incremento operativo, observando así una menor variación en este refinado. En relación a las gasolinas la caída ha sido más dramática, pero se está dando un incremento paulatino en la demanda, al igual que sus precios. Y de manera muy similar está sucediendo en el mercado mexicano".