La economía nacional creció 12 por ciento en el tercer trimestre del año comparado con el segundo trimestre. Al interior, destaca el fuerte crecimiento del sector industrial (22 por ciento trimestral), debido al sólido dinamismo de la economía estadounidense. En contraste, el sector servicios solo aumentó 8.6 por ciento, siendo que dicho sector representa alrededor del 67 por ciento del PIB nacional. Los empleos formales se están recuperando, pero de manera más gradual. Esto se explica por la dualidad que hoy en día experimenta la economía nacional.
La fuerte contracción económica en el primer semestre del año, debido al confinamiento, afectó fuertemente a la demanda interna del país. Se perdieron miles de empleos, que sumando los informales, llegan a más de 12 millones. La reciente recuperación de empleos se está dando en el sector manufacturero, sobre todo de exportación. Lo anterior debido a que los Estados Unidos se está recuperando de manera sostenida. Las exportaciones manufactureras nacionales están creciendo y es probable que recuperen su nivel de principios de 2019 a finales de este.
En contraste, la demanda interna se mantiene deprimida. El cierre de miles de Pymes es reflejo del impacto adverso de la pandemia y de la falta de apoyos fiscales hacia estas empresas. Además, los programas de liquidez y créditos diseñados por Banxico no se han traducido en mayores créditos y menores tasas de interés. La fuerte pérdida de Pymes, que representan más del 70 por ciento de los empleos nacionales provocará un incremento importante en los índices de pobreza del país. Según estudios de la CEPAL, la pobreza aumentará en México de 46 a 67 por ciento en un año.
Hacia futuro es claro que la economía entrará en dos ritmos de crecimiento. Primero, el relacionado con la demanda externa, sobre todo exportación hacia EUA, y el segundo la demanda interna que tendrá un crecimiento moderado. Se estima que la economía de EUA se recuperará en alrededor de 1 año y medio en un entorno donde los apoyos fiscales continuarán para proteger los empleos de ese país, y las tasas de interés se mantendrán en niveles bajos históricos por varios años. Asimismo, es probable que la economía nacional se recupere en al menos cuatro años.
Este dualismo de la economía profundizará la desigualdad en la sociedad y en las regiones del país. Los estados fronterizos, tradicionalmente exportadores, se beneficiarán y se recuperarán más rápido.
Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.