Ante un aparente abuso de las empresas gasolineras en el país, al obtener jugosas ganancias en la venta de combustible, sí sería factible que el gobierno federal establezca un control de precios, o bien, retomar el antiguo esquema que prevalecía antes de la liberalización de los precios, consideraron analistas del sector.
"Sí es viable, ya que la propia Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) sospecha que las empresas gasolineras podrían estar llevando a cabo prácticas ilegales en ciertas regiones del país que, de alguna manera, les permiten acrecentar sus márgenes de ganancia. Si esto se comprueba con la investigación que lleva a cabo el organismo, el gobierno con el fundamento de la Cofece podría dar marcha atrás a la liberalización de los precios de las gasolinas y que sea nuevamente Hacienda quien defina los precios y topes en el margen de ganancia para los dueños de grupos gasolineros", señaló Armando Cedillo, abogado y especialista en el sector.
El gobierno federal tiene que propiciar las condiciones para una competencia sana en el mercado gasolinero.
"Aunque lo ideal sería que el gobierno estableciera una metodología para determinar los márgenes de ganancia y no un control de precios", indicó.
Sin embargo, lo más factible será que el gobierno se acoja a la resolución de la Cofece de que no existen condiciones para una libre competencia en el mercado gasolinero, así que ha regresarse al esquema anterior.
También está la opción de que tanto la CRE como la Cofece puedan coincidir en regular el precio de la gasolina en caso de existir prácticas monopólicas en cada región del país.
Para Luis González, analista del sector, el regular los precios podría perjudicar a la libre competencia.
Explicó que justamente la Reforma Energética y la liberalización de precios de los combustibles se dieron para que los extranjeros entraran, y así contar con un mercado libre a la competencia.