La reciente pandemia cambió la forma de hacer negocios, y una de las mejores vías para adaptarse a ese nuevo escenario global ha sido la digitalización. En este ámbito es cada vez más importante adoptar procesos tecnológicos innovadores, como lo son los servicios de cloud computing.
Forbes afirma que esta tecnología potencia la productividad, la seguridad y facilita el acceso a tecnologías recientes a un menor costo. Para adaptarla, primero debes conocer cuáles son los tipos de nubes disponibles y qué funcionalidades pueden entregar a tu empresa.
Servicios de Cloud Computing
El cloud computing son servicios alojados en la nube que, permite el acceso remoto a recursos computacionales como softwares, almacenamiento y procesamiento de datos, sin que tu empresa tenga que gestionarlos. La nube tiene tres modelos de despliegue adaptados a cada necesidad: pública, privada e híbrida:
Nube pública
La nube pública es aquella que ofrece recursos a través de Internet y los comparte con distintas personas y organizaciones, bien sea de forma gratuita o paga. Sus centros de datos están distribuidos en todo el mundo, y tanto la administración como el mantenimiento de la infraestructura están a cargo de los proveedores.
Si tu empresa busca una alternativa a las arquitecturas de TI locales para satisfacer las demandas de cargas de trabajo, en la nube pública puede:
- Encontrar escalabilidad y aprovisionamiento de autoservicio con acceso casi infinito.
- Es una buena opción para quienes desean reducir los costos y mantenimientos asociados a TI.
- Libera tiempo que puede ser aprovechado en otras gestiones importantes.
Nube Privada
Aunque esta modalidad combina beneficios de la nube pública, como escalabilidad y flexibilidad, en el entorno privado los recursos de hardware y software están dedicados de forma exclusiva a un solo cliente, quien tiene acceso único a ellos, lo que aporta mayor seguridad y dedicación. Con esta solución, tu empresa puede encargarse de la gestión o subcontratarla a un tercero.
Al contar con estas características, este servicio en la nube resulta ideal para:
- El manejo de información sensible o confidencial, esto incluye desde datos financieros y documentos de propiedad intelectual hasta informes que contengan identificación personal como registros médicos, ubicación del cliente, entre otros.
- Tener mayor control, puesto que al ser accesible solo a tu empresa, la nube se podrá configurar a la medida de las necesidades que requieras.
Nube híbrida
Como su nombre lo indica, este modelo de nube se desarrolla en dos o más entornos informáticos independientes, abarcando tanto nubes públicas como privadas para poder ofrecer sus recursos y servicios de computación. Por eso, la nube híbrida está destinada a aquellas empresas que mueven cargas de trabajo entre entornos y, por ende, no pueden depender únicamente de un tipo de nube.
A través de ella, tu negocio puede:
- Escalar de forma rápida.
- Solo pagas por lo que utilizas.
- Tienes la posibilidad de gestionar tus datos con total libertad para cumplir con los requisitos normativos.
- Migrar aplicaciones en las distintas nubes para transformar la infraestructura técnica, y protegerse de amenazas.
Apoya tus actividades en servicios en la nube
Los servicios de cloud computing, en cualquiera de sus tres formatos, conceden a tu organización ventajas que ayudan a mejorar su competitividad e impulsan un mayor retorno de la inversión.
Más allá del almacenamiento de datos, los servicios en la nube van a permitirte recuperarse de fallos, desarrollar aplicaciones y analizar información, entre otros beneficios, solo debes identificar cuál es la opción más conveniente.