India reportó más de 200 mil nuevas infecciones por COVID-19 este jueves (hora local), su aumento más alto en un día desde que estalló la pandemia, mientras una nueva ola más letal se apodera del que ya es el segundo país más afectado del mundo.
Con 200 mil 739 casos nuevos, el brote en la nación del sur de Asia ha registrado más de 14 millones de infecciones. El total de muertes aumentó a 173 mil 123, a pesar de que ya se administraron más de 114 millones de dosis de vacunas, según los últimos datos del Ministerio de Salud de India.
Después de que las nuevas infecciones disminuyeron a principios de año, los casos de coronavirus comenzaron a aumentar nuevamente en marzo.
La última ola, que no muestra signos de retroceso, ha comenzado a abrumar a los hospitales y crematorios en India, provocó una escasez de vacunas y obligó a muchas partes del país a imponer nuevos confinamientos y restricciones a la movilidad para romper la cadena de transmisión viral.
A principios de esta semana, India aceleró la aprobación de vacunas COVID, que ya fueron palomeadas en algunos países desarrollados, para tener un grupo más amplio de inyecciones en una carrera para frenar el brote.
Esta medida abrió efectivamente la puerta a las inyecciones de vanguardia desarrolladas por Pfizer y Moderna y se produjo un día después de que el gobierno del primer ministro Narendra Modi concediera la aprobación de uso de emergencia a la vacuna Sputnik V de Rusia, la tercera vacuna aprobada para la inoculación de la nación.