La pandemia ha hecho retroceder en al menos una década los avances realizados para aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral en América Latina y el Caribe.
De no ser por la crisis desatada por el coronavirus, las mujeres de la región habrían alcanzado en 2055 una tasa de participación laboral de 69%, igualando a la de Estados Unidos, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) publicado el jueves. Sin embargo, debido al impacto que ha tenido la pandemia en los mercados laborales de la región, alcanzar ese nivel llevará ahora una década más.
En julio de 2020 se habían perdido más de 31 millones de empleos en toda la región, la mayoría de ellos de mujeres, según el BID. Las mujeres menores de 25 años, con menos educación formal, lo que limita sus oportunidades a empleos dentro de la economía informal, fueron las más afectadas.
El retroceso se produce en una región que, hasta que llegó el COVID-19 , tenía la tasa de crecimiento más alta del mundo para las mujeres en la fuerza de trabajo.
La participación laboral femenina en América Latina y el Caribe alcanzó el 58% en 2019, frente al 52% en 2000, un ritmo sin precedentes, según el BID.