El gobierno del primer ministro Narendra Modi espió a su rival político Rahul Gandhi utilizando el software Pegasus de la empresa israelí NSO Group, aseguró el partido de oposición más grande de la India.
Los teléfonos pertenecientes a Gandhi y al comisionado principal de elecciones de la India, Ashok Lavasa, fueron identificados como objetivos potenciales del software espía en el período previo a las elecciones generales de 2019, alegó el Congreso Nacional de la India.
Citó investigaciones de los medios sobre una lista filtrada de posibles objetivos de NSO, cuya herramienta de espionaje Pegasus permite a los clientes infiltrarse en teléfonos y monitorear mensajes de texto, transmisiones de cámaras y micrófonos.
“¿Espiar a las fuerzas de seguridad, el poder judicial, los ministros del gabinete, los líderes de la oposición, incluido Rahul Gandhi, los periodistas y otras actividades de la India a través del software espía de una entidad extranjera, no es una traición y un desmantelamiento inexcusable de la seguridad nacional?”, dijo el portavoz del Congreso, Randeep Surjewala.
Surjewala planteó preguntas sobre si Modi o el ministro del Interior, Amit Shah, habían contratado a NSO y cuánto dinero se había gastado en el software espía. El Congreso también pidió la destitución de Shah y una investigación sobre las acusaciones.
La Oficina del Primer Ministro no respondió de inmediato a las llamadas o correos electrónicos en busca de comentarios. Sin embargo, su gobierno abordó el tema en una conferencia de prensa celebrada para refutar las afirmaciones del Congreso.
“No había ni una pizca de evidencia” en la historia de Pegasus que muestre vínculos con el gobierno o el partido gobernante, declaró Ravi Shankar Prasad, portavoz y exministro de tecnología.
“Si más de 45 países están usando Pegasus, ¿por qué solo se apunta a India?”, criticó.
El recién nombrado ministro de tecnología de la nación, Ashwini Vaishnaw, cuyo teléfono se encontraba entre los que figuran como comprometidos en un informe del Washington Post, también negó cualquier intento de vigilancia por parte del Gobierno.
“Echemos un vistazo a los protocolos establecidos en la India en lo que respecta a la vigilancia”, dijo Vaishnaw al parlamento. “Cualquier forma de vigilancia ilegal no es posible con los controles y contrapesos de nuestras leyes e instituciones sólidas. En la India existe un procedimiento bien establecido mediante el cual se lleva a cabo la interceptación legal de comunicaciones electrónicas con fines de seguridad nacional“, subrayó.
Antes de las elecciones de 2019, el Gobierno de Modi negó las acusaciones publicadas en los medios de comunicación locales de que había comprado el software espía Pegasus que supuestamente se utilizó para hackear más de mil 400 teléfonos, incluidos los de varios abogados, periodistas y activistas indios.
En ese momento, Facebook, matriz de WhatsApp, informó a los usuarios que se había enviado malware a sus dispositivos, según un comunicado de la compañía. Facebook demandó a NSO, alegando que la empresa hackeó los teléfonos móviles de los usuarios.
Esta última investigación de Forbidden Stories, una organización sin fines de lucro con sede en París, que incluye un análisis forense digital del laboratorio de seguridad de Amnistía Internacional, se compartió con un consorcio de medios que incluye al Washington Post y otros medios.