La región de la ciudad de Nueva York se está recuperando de la devastación causada por los restos del huracán Ida, que provocó tornados, paralizó los servicios de transporte y desató inundaciones catastróficas que dejaron al menos 20 personas muertas.
Las aguas inundaron carreteras, terminales de aeropuertos, estadios de béisbol y estaciones de Metro. Ocho personas murieron en Brooklyn y Queens, dijo un portavoz de la policía. Al menos otras 12 personas murieron en Nueva Jersey y Pensilvania, según funcionarios y medios de comunicación locales. Los tornados azotaron Maryland y Nueva Jersey.
Casi 170 mil clientes en la costa este de EU no tenían electricidad el jueves, según PowerOutage.us. Pensilvania tuvo la mayor cantidad de cortes con alrededor de 78 mil, seguida de números más pequeños en Nueva Jersey, Nueva York y Connecticut.
Las calles inundadas complicaban los esfuerzos para restaurar la electricidad. “Es muy peligroso. Nuestros camiones no pueden moverse en estos caminos que están bloqueados por las inundaciones “, dijo Jamie McShane, portavoz de la empresa de servicios públicos de Nueva York Con Edison, el jueves por la mañana. “Había coches abandonados por todas partes, por lo que es muy difícil moverse”.
A continuación algunas imágenes sobre las afectaciones provocadas por Ida:
Coches que quedaron atrapados en la inundación detrás de un edificio de apartamentos, en Mamaroneck, Nueva York.
Un coche abandonado se encuentra en medio de calles inundadas en una zona residencial. Mamaroneck, N.Y
Los coches quedan apilados después de las inundaciones como resultado de los restos del huracán Ida en el complejo de Oakwood Plaza Apartments en Elizabeth, NJ.
Los residentes de un edificio de apartamentos despejan los escombros en una calle luego de que bajara la inundación, en Mamaroneck, Nueva York.
Félix Delapuente, un vecino en el municipio de Queens de Nueva York, donde algunos de los residentes fallecieron, muestra el daño por inundación en su sótano.
Daños en un edificio en el municipio de Queens de Nueva York.
La gente atraviesa senderos inundados bajo la intensa lluvia en el Billie Jean King National Tennis Center.
Con información de Bloomberg / Elise Young y Emma Kinery*