Hace 20 años, el 11 de septiembre de 2001, dos aviones Boeing 767 se estrellaron contra las Torres Gemelas, que con sus 110 pisos eran los rascacielos más altos de la ciudad de Nueva York, en Estados Unidos.
El primer avión chocó contra la torre norte a las 8:45 horas. El edificio ardió durante 102 minutos y a las 10:28 horas se derrumbó en solo 11 segundos.
A las 9:03 horas, 18 minutos después del primer choque, el segundo avión impactó la torre sur. Estuvo en llamas durante 56 minutos y finalmente cayó a las 9:59 horas, en nueve segundos.
En un reportaje publicado este martes, BBC Mundo recuerda esta cronología del colapso de estos emblemáticos edificios y explica las dos razones científicas por las que cayeron.
Según estudios del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), publicado en 2002 —señala el reportaje— y del del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), cuya versión final se publicó en 2008, el derrumbe se debió a la conjunción de dos factores:
- El severo daño estructural que causaron los choques de los aviones en cada edificio.
- La cadena de incendios que se expandieron a lo largo de varios pisos.
“Si no hubiese habido incendio, los edificios no se habrían derrumbado”, dijo a BBC Mundo el ingeniero civil Eduardo Kausel, profesor emérito en el Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental en MIT y líder del estudio mencionado.
“Y si hubiese habido únicamente incendio, sin el daño estructural, tampoco se habrían venido abajo”, agregó. “Las torres tenían mucha resistencia”, comentó el ingeniero.
En tanto, de acuerdo con el informe del NIST, existen documentos oficiales que indican que las torres estaban diseñadas para soportar el impacto de un avión Boeing 707, que era la aeronave comercial más grande que existía cuando fueron diseñadas.
De modo que, juntos, el impacto y el incendio, produjeron el colapso de los emblemáticos rascacielos neoyorquinos.