Francia quiere que Irán y Venezuela regresen a los mercados petroleros para aliviar la presión rusa sobre los suministros de energía que ha disparado los precios.
De acuerdo con Reuters, la información fue dada a conocer este lunes por un funcionario de la presidencia francesa, quien habló sobre un mecanismo planificado para limitar el precio del petróleo para que sea lo más amplio posible y no se limite a la producción rusa.
Información recogida por la agencia refiere que el funcionario francés, que se mantiene en el anonimato, señaló que “Volodymyr Zelenskiy, dijo a los líderes del G7 que las condiciones no eran las adecuadas para negociar con Rusia y que quería estar en una posición de fuerza antes de comenzar cualquier negociación”.
Crisis de gas en Europa
Los precios del gas natural en Europa subieron debido a que los profundos cortes de suministro de Rusia están ralentizando el ritmo de recarga de los sitios de almacenamiento, amenazando con no alcanzar los niveles necesarios para mantener los hogares calientes en el próximo invierno.
A los compradores les resultó más difícil reemplazar el gas ruso de otros lugares después de que los flujos a través de una ruta importante hacia la Unión Europea se redujeron en un 60 por ciento a principios de este mes.
Alemania advierte sobre el racionamiento, mientras que el comisionado de Energía de la UE, Kadri Simson, dijo el lunes que es posible que no haya suficiente suministro en todo el mundo para reemplazar completamente los flujos rusos.
“Existe la amenaza de un escenario en el que se tendría que racionar el gas, lo que, en mi opinión, conduciría a una grave crisis económica en Alemania y Europa”, dijo el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, antes de una reunión de ministros de energía de la Unión Europea en Luxemburgo. “Una crisis de suministro en un estado miembro conducirá a una crisis económica en otro”.
Los almacenamientos completos son fundamentales para que Europa pase el invierno cuando la demanda de calefacción alcanza su punto máximo.
Los niveles de existencias están actualmente más de la mitad, pero aún por debajo del promedio de los últimos cinco años. Un corte en los suministros rusos podría significar que los inventarios de la UE estén llenos en menos del 75 por ciento para el 1 de noviembre, dijo Simson, por debajo del objetivo del 80 por ciento.
Los altos precios de la gasolina ya están obligando a las industrias a reducir la demanda y ejerciendo más presión sobre la economía europea que está luchando contra una inflación creciente y un crecimiento escaso. Las reservas suficientes también son clave para permitir que las naciones miembros se ayuden entre sí enviando suministros a países con escasez. Las existencias escasas este invierno podrían desafiar esa unidad.
Crecen los llamados a recortar el consumo para evitar tal situación. Los directores ejecutivos de las empresas energéticas francesas instaron a los consumidores a ahorrar electricidad, gas y petróleo de inmediato. El gobierno alemán ya ha presentado un paquete de medidas que incluye incentivos para que la industria reduzca la demanda.
“La situación es grave”, dijo Simson. Los flujos rusos “podrían caer aún más. Tenemos que intensificar nuestra respuesta a esta acción rusa. Rusia ha elegido una táctica de chantaje. Tenemos que asegurarnos de estar preparados para cualquier escenario”.
Con información de Bloomberg