La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, se reunió la noche de este martes (mañana del martes en Asia) con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, y proclamó que EU “no abandonará a Taiwán”, isla que describió como un “ejemplo” para el mundo.
Por otra parte, la presidenta taiwanesa, que condecoró a Pelosi con la Orden de las Nubes Propicias por su “apoyo” al territorio, mostró su esperanza de que Taiwán y EU “continúen su apoyo mutuo” para hacer que “la democracia brille de nuevo”, a la vez que agradeció a Pelosi sus “acciones concretas de apoyo a Taiwán en un momento crítico”.
La política estadounidense aterrizó en Taipéi la noche del martes (tiempo local) en un viaje no anunciado oficialmente que ha indignado al Gobierno chino, que está respondiendo con un despliegue militar en el Estrecho de Taiwán y sanciones comerciales sobre la isla.
Taiwán denuncia incursión de aviones de China
Un total de 21 aviones militares chinos entraron este martes en la Zona de Identificación de Defensa Aérea (ADIZ) de Taiwán, denunció el Ministerio de Defensa de la isla en un comunicado.
La cartera dio a conocer las incursiones en la madrugada del miércoles (tiempo local), poco después de que llegase a la isla de visita la presidenta de la Cámara de Representantes de EU, Nancy Pelosi, un viaje que Pekín calificó de “provocación”.
Según el Ministerio castrense, cazas J-16 y J-11, aviones-radar KJ-500 y aviones de reconocimiento Y-8 e Y-9 participaron en la incursión, que tuvo lugar en la parte suroeste de la ADIZ taiwanesa.
Las irrupciones se produjeron el martes, cuando Pelosi aún no había llegado a Taiwán pero medios estadounidenses y taiwaneses daban por segura la visita.
La Fuerza Aérea isleña emitió advertencias por radio y movilizó unidades para “responder” a la incursión en la ADIZ, la cual no está definida ni regulada por ningún tratado internacional y no equivale a su espacio aéreo, sino que abarca un área más extensa que incluye áreas de China continental.
China llama a embajador de EU para pedir explicaciones
El Ministerio chino de Exteriores convocó al embajador de Estados Unidos en el país asiático, Nicholas Burns, para protestar por la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
El encargado de recibir a Burns fue el viceministro Xie Feng, quien trasladó al diplomático estadounidense el malestar de Pekín por la presencia en la isla de Pelosi, quien se juega “una condena unánime por una provocación deliberada y por jugar con fuego”, según recoge hoy la agencia oficial Xinhua.
Xie dijo que la visita constituye una seria violación del principio de ‘una sola China’, que daña las bases de la relación bilateral y que ataca seriamente a la soberanía e integridad territorial de su país además de socavar la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán.
“Las consecuencias son extremadamente serias. China no se quedará cruzada de brazos”, sostuvo el vicecanciller, quien subrayó que EU debe rendir cuentas por “decir una cosa y hacer otra” respecto al principio de ‘una sola China’.
Mencionó, en este sentido, acciones de Washington como la inclusión de Taiwán en su “Estrategia para el Indo-Pacífico”, la desaparición de la frase “Taiwán es parte de China” de la página web del Departamento de Estado o el incremento de la venta de armas a la isla.
El alto funcionario insistió en que EU pagará por sus errores y urgió al país a rectificar y tomar medidas prácticas para revertir “los efectos adversos” provocados por la visita de Pelosi antes de que la situación en el Estrecho y las relaciones bilaterales sean “irreparables”.
Xie exhortó a Washington a dejar de usar a Taiwán para “contener a China” y de interferir en los asuntos internos de Pekín.
“Taiwán es de China y eventualmente retornará al abrazo de la madre patria. El pueblo chino no le teme a los fantasmas, la presión ni el mal”, enfatizó.